Una religiosa se ofreció a pagar la multa de un presunto estafador que fue atrapado por un grupo de personas y entregado a efectivos de la Policía Municipal en la transitada avenida Ignacio Ramírez, en el centro de Chilpancingo.

De acuerdo con la versión de la policía, la persona detenida había estafado hace 15 días a una señora de nombre Reprimida Catalán, a quien le había pedido mil 100 pesos a cambio de un paquete de materiales para construcción.

Hace dos semanas, el hombre había citado a la mujer en la Escuela Secundaria Antonio I. Delgado, para que le hiciera entrega de los insumos, sin embargo jamás llegó.

Previamente, el ahora detenido se había identificado como trabajador del Ayuntamiento de Chilpancingo, y había informado que su función era el de atender a la población vulnerable a través de despensas.

Alrededor de las 14:00 horas, la víctima caminaba por el zócalo cuando vio a lo lejos al supuesto estafador por lo que inmediatamente pidió a las personas que por ahí transitaban que lo detuvieran.

El hombre fue interceptado una cuadra fuera del zócalo, cerca de la Plaza Chilpancingo y después fue esposado por dos policías del municipio.

Por el lugar, caminaba en ese momento una religiosa, conocida en Chilpancingo como la “hermana Estelita”, quién se ofreció a pagar la multa por la falta administrativa del hombre.

“Hay que perdonar como cristo”, se le escuchó decir antes de acudir a las instalaciones de “las barandillas”, donde son recluidos quienes cometen faltas en la vía pública.

De acuerdo con personal de la Secretaría de Seguridad Pública de Chilpancingo, una sanción por esta falta, rondaría entre los 300 a 500 pesos.