Trabajadores del Servicio Médico Forense (Semefo) de la capital del estado vinieron por 20 cadáveres putrefactos encontrados en tumbas clandestinas en distintos lugares de Acapulco, para practicarles los estudios de ADN y antropología forense.
La Fiscalía General tiene interés de que a pesar que los cuerpos no han sido identificados, las investigaciones científicas no se detengan y exige a la Policía Ministerial del Estado resultados de las indagaciones de los casos.
El personal del Semefo se observó con su uniforme blanco, guantes y cubiertos del rostro para evitar contagios en la piel por la putrefacción de los cuerpos.
Abundaron que por cada cadáver se forma una carpeta de investigación, donde los peritos en antropología forense tienen que anotar edad aproximada, sexo, estatura y otros datos.
Todos los cuerpos paulatinamente serán llevados al Servicio Médico Forense de Chilpancingo para los estudios y peritajes de rigor.