Se desató nuevamente la violencia en el poblado de Xaltianguis, al retomar el control los comunitarios, quienes bloquearon con un vehículo incendiado la carretera federal México-Acapulco, para exigir la liberación de sus compañeros detenidos y amenazan con no permitir que ingresen nuevamente las autoridades.
Estas acciones detonaron cuando se dio la orden a los más de 250 elementos del Ejército, Guardia Nacional y Policía del Estado, retirarse de esa población que se encuentra a media hora del puerto de Acapulco, a fin de evitar una confrontación directa con los policías comunitarios.
Esto ha generado el desplazamiento de las familias que habitan en el lugar, en tanto que otros se quedaron a cuidar sus viviendas, mientras que, sobre la carretera federal, civiles armados mantienen un cerco en toda esa zona, listos para confrontar a quienes pretendan ingresar a la comunidad, en donde a distancia se aprecia el humo denso que deja el vehículo incendiado.
