Tres integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), fueron asesinados en un ataque armado perpetrado por un comando en la vivienda del “comandante” David Barrientos del poblado del Valle del Ocotito perteneciente al municipio de Chilpancingo. Trascendió, que otro integrante de la organización se encuentra herido y uno más desaparecido.
En esta zona del estado, se suspendieron las labores y se instaló un operativo de seguridad con integrantes de la Base de Operaciones Mixtas conformado por elementos del Ejército, Policía Federal y estatal.
Los hechos se registraron cerca de las cinco de la mañana en la calle 24 de febrero entre las colonias Vista Hermosa y Zapata, a la altura del kilómetro 314, a unos 30 minutos de la capital del estado, donde fueron localizados decenas de casquillos percutidos de armas largas y cortas, así como varios vehículos con disparos de arma de fuego.
Las fuerzas de seguridad en coordinación con personal de la Fiscalía General del Estado, realizaron las diligencias correspondientes y se desplegó en busca de los agresores y “para resguardar a la población de la zona, prevenir actos de violencia y localizar a los presuntos responsables de los hechos”.
Se informó que al llegar a la localidad, las autoridades, fueron informados que la casa del comandante de la UPOEG, David Barrientos fue atacada a balazos, el cual resultó ileso, pero en el lugar tres policías ciudadanos fueron asesinados, los cuales fueron trasladados a sus casas, las víctimas iban a bordo de una camioneta Ford tipo Ranger verde.
Además, se encontraron que al menos cuatro vehículos tenían impactos de arma de fuego, entre ellos la camioneta verde que tenía al menos cuatro disparos en el medallón y otros más en el parabrisas y las ventanillas del lado del copiloto y que se impactó contra una vivienda.
De los hechos, se informó que un grupo de hombres armados irrumpió en el poblado y dispararon contra la vivienda y los policías ciudadanos, quienes intentaron repeler la agresión, sin embargo perecieron por los impactos de arma de fuego.
La balacera provocó un fuerte despliegue policial, donde llegaron agentes de la Policía Federal, Estatales, Ministeriales así como efectivos del Ejército. Directivos, maestros y padres de familia, suspendieron actividades en los distintos niveles educativos por tiempo indefinido, a unos días de que concluya el ciclo escolar.
La zona fue acordonada, mientras que algunos agentes policíacos recorrieron a pie la zona, en tanto que el personal de la Fiscalía realizó las diligencias de ley, donde observaron casquillos percutidos regados en la vía. Los cadáveres de los policías ciudadanos fueron llevados por sus familiares a sus domicilios.
Cabe recordar, que el pasado martes siete de mayo, dos policías ciudadanos de la UPOEG, fueron asesinados en un enfrentamiento con integrantes del Frente Unido de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero en el poblado de Xaltianguis de Acapulco, donde tres más resultaron heridos, y días después, uno más perdió la vida debido a las heridas de arma de fuego.
La policía ciudadana, tiene más de cuatro años de realizar labores de seguridad en el poblado del Ocotito, donde se han registrado varios enfrentamientos armados con otros grupos de civiles armados e integrantes de grupos de la delincuencia organizada
