Washington.- El presidente de EU, Joe Biden, puede trasladarse "tan pronto como esta semana" a Texas, bajo "desastre mayor" a raíz de un temporal que ha afectado a gran parte del país y trajo gélidas temperaturas a ese estado, donde miles de hogares quedaron sin electricidad y ahora enfrentan la falta de agua.
El mal tiempo, que ha causado al menos 59 muertos, ha obligado al gobierno de Biden a movilizar fondos federales para apoyar en las labores de mitigación de los daños, pero también para tender una mano a las familias cuyas viviendas sufrieron graves daños.
EN EL MOMENTO APROPIADO
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, indicó que el gobernante está "muy ansioso" por ir a ese estado "y mostrar su apoyo", pero aseguró que "no quiere quitarle recursos o atención" a la emergencia.
"Vamos a hacer eso en el momento apropiado y en coordinación con la gente en el terreno. Podría ser tan pronto como esta semana", declaró Psaki al programa "This Week", de la cadena ABC News.
Pero el alcalde de Houston, Sylvester Turner, respondió que Biden puede ir ahora a ese estado.
"Le daríamos la bienvenida y no sería una distracción, ni una carga", afirmó el funcionario al espacio "Face the Nation", de la cadena CBS News.
TUBERÍAS ROTAS Y MUCHAS NECESIDADES
"Ahora mismo -explicó-, con tantas casas en la ciudad que tienen tuberías que se rompen debido al clima gélido y fugas importantes, daños importantes por agua, necesitamos muchos materiales y suministros de plomería".
Turner señaló que "los cortes de energía y el sistema de agua están interconectados", ya que ante la falta de luz debieron usar más generadores, que se alimentan de agua, para atender la emergencia.
Betsy Price, alcaldesa de Fort Worth, cuyo condado fue incluido entre los 77 donde está vigente la declaratoria de "desastre mayor", consideró que en Texas han enfrentado "una tormenta perfecta", sin que ello aluda a un "juego de palabras".
"Estamos enfocados en devolver el agua y la energía a nuestros ciudadanos ante todo", sostuvo la funcionaria, quien admitió que incluso su casa "está inundada".
"Esto ha sido algo así como la edad media aquí en Texas", lamentó el congresista Colin Allred, citado por el diario The Washington Post, quien relató que "la gente está quemando sus muebles y sus cercas en busca de calor", y que se están encontrando personas de avanzada edad "literalmente congeladas" en sus camas.
La administración del gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció este sábado que recibió autorización para permitir que los beneficiarios de bonos de alimentos entregados por el Gobierno federal los usen para comprar comidas preparadas, ya que estas subvenciones solo cubren la compra de abarrotes.
También levantó algunas regulaciones para permitir que los camiones que distribuyen bebidas alcohólicas apoyen en la entrega de comestibles y agua embotellada, al tiempo que se reunió con integrantes Legislatura local para discutir sobre las elevadas facturas de electricidad que han recibido algunos residentes después del temporal.
AYUDA FEDERAL Y DE OTROS ESTADOS
En una comparecencia ante la prensa, Abbott previó que el suministro eléctrico "se restablecerá por completo en todo el estado de Texas, en todas las casas, ya sea esta noche o mañana", y aseguró que su siguiente preocupación es el restablecimiento del agua.
"Quiero enviar mi gratitud a Carolina del Norte y Kentucky, que también enviaron aviones para ayudar. Ha habido un total de 162 entregas de camiones que han entregado más de 2 millones de botellas de agua, y luego helicópteros y aviones, han entregado más de 1,4 millones de botellas de agua", detalló el gobernador.
El portavoz nacional de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés), Daniel Llargues, explicó a Efe que la declaración de "desastre mayor" en Texas es de "gran magnitud" y recibió el visto bueno de Biden 24 horas después de que el gobernador de ese estado la solicitara.
La medida permite ofrecer no solo asistencia pública a los condados para recuperar infraestructura y asumir otras tareas, sino que también contempla apoyo a las personas que sufrieron daños en sus viviendas que no son cubiertos por las compañías de seguro y para la mitigación de riesgos.
Llargues detalló que, por las bajas temperaturas, las tuberías de muchas casas "se reventaron o se congelaron y entonces causaron daños en el techo, en las paredes".
"Los residentes de este estado no están acostumbrados a ver este tipo de tormentas invernales, este tipo de tiempo severo", comentó el funcionario, para quien en Texas son más comunes eventos como huracanes, tormentas tropicales o incendios forestales.