Corte de Japón emite histórico fallo sobre prohibición de matrimonio igualitario

Taiwán se convirtió en el primer lugar de Asia en legalizarlos en 2019

  · miércoles 17 de marzo de 2021

Cortesía | REUTERS

Un tribunal japonés dictaminó el miércoles que no permitir que personas del mismo sexo se casen es "inconstitucional", sentando un precedente en la única nación del G7 que no reconoce plenamente las parejas del mismo sexo.

La sentencia de un tribunal de distrito, la primera en Japón sobre la legalidad de los matrimonios entre personas del mismo sexo, es una importante victoria simbólica en un país en el que la Constitución sigue definiendo el matrimonio como algo basado en "el consentimiento mutuo de ambos sexos".

Aunque será necesaria una nueva ley antes de que los matrimonios entre personas del mismo sexo puedan celebrarse, el abogado de los demandantes calificó la sentencia de "revolucionaria", mientras que los activistas LGBT la consideraron algo que cambiará sus vidas.

"Su valor es absolutamente inconmensurable", dijo Gon Matsunaka, de 44 años, director del grupo activista Matrimonio para Todos Japón y representante de Pride House Tokio. "Estoy encantado".

Pese a que la legislación japonesa se considera relativamente liberal para los estándares asiáticos, las actitudes sociales han mantenido a la comunidad LGBT en gran medida invisible en la tercera economía del mundo. Taiwán se convirtió en el primer lugar de Asia en legalizar los matrimonios del mismo sexo en 2019.

Bajo las normas actuales en Japón, las parejas del mismo sexo no pueden casarse legalmente ni heredar los bienes de su pareja -como la casa que pueden haber compartido- y tampoco tienen derechos parentales sobre los hijos de sus parejas.

Aunque los certificados de convivencia expedidos por los municipios ayudan a las parejas del mismo sexo a alquilar una vivienda juntos y a tener derechos de visita en caso de una hospitalización, no les otorgan los mismos derechos legales completos de los que gozan las parejas heterosexuales.

"La orientación sexual no puede cambiarse ni seleccionarse por la voluntad de una persona", dice la sentencia. "Es un trato discriminatorio (...) que no puedan recibir ni siquiera algunos de los beneficios legales que tienen los heterosexuales".