El subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, aceptó retomar el diálogo con las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) para fortalecer el modelo de Justicia Transicional del actual Gobierno federal.
Entre ellos, mencionó, están incluidos el poeta Javier Sicilia y el especialista en Derecho Penal Internacional, Justicia Transicional y Derechos Humanos, Jacobo Dayán, quienes denunciaron a El Sol de México una traición a los acuerdos pactados, cuando, ya electo el presidente Andrés Manuel López Obrador, hizo caso omiso al documento entregado por las OSC “Propuesta Ciudadana para la Construcción de una Política sobre: Verdad, Justicia y Reparación a las víctimas de la violencia y de las violaciones a Derechos Humanos”.
“Por supuesto que estamos, no en la idea de retomar, sino de mantener el diálogo, y no solamente con Jacobo Dayán y con todo su grupo, sino con todas las organizaciones que, efectivamente en el mes de junio del año pasado hicieron llegar este documento, con el cual tenemos muchísimas coincidencias y con el cual hemos venido teniendo resultados”, afirmó.
ENCINAS DESCARTA RUPTURA DE DIÁLOGO
En este sentido, Alejandro Encinas rechazó que existiera un acuerdo para que el documento se presentara los días 1, 3 o 10 de diciembre como afirmaron Sicilia y Dayán. Así como que se negara a mantener una comunicación directa con estos actores, por lo que descartó una ruptura de diálogo y señaló que la ruta a trazar ahora será “seguir discutiendo y ponernos de acuerdo”.
“Para mí no hay diálogo roto. Estamos en la mejor disposición. Por supuesto que existe la disposición y voluntad de dialogar, y además son gente que merecen mucho mis respetos”, refirió.
Sin embargo, comentó que en el documento encuentra muchas coincidencias, así como algunas diferencias, pues -añadió- “no necesariamente tenemos que estar de acuerdo en todo”.
Además, comentó que algunas cuestiones exigidas por las OSC se llevan a cabo, ya que mencionó “el Mecanismo de Reparación Extraordinario que plantean ya está establecido en la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV)”, que encabeza la recién electa, Mara Gómez Pérez.
“Los mecanismos extraordinarios que nos han solicitado como la participación de las víctimas en todos los actos para la promoción, actuación e implementación de todos los instrumentos de participación ciudadana ya se han venido instrumentando”, agregó.
Asimismo, comentó que de los acuerdos más importantes alcanzados se encuentra la constitución del Mecanismo Extraordinario de Identificación Forense, que dijo, fue resultado de varios meses de discusión y que hemos tenido un proceso muy importante para su instrumentación.
EL ACUERDO
Como lo publicó El Sol de México, en marzo de 2018, durante el aniversario luctuoso de Juan Francisco Sicilia, Javier y uno de sus mejores amigos, Jacobo Dayán, determinaron buscar a los cinco candidatos a la Presidencia para impulsar un acuerdo por la paz y la seguridad. Casi todos atendieron su invitación, excepto la independiente, Margarita Zavala.
A principios de abril de 2018, Sicilia y Dayán acudieron a una reunión privada con López Obrador, en una oficina “muy elegante” que les prestó Alfonso Romo, ubicada en un edificio en la esquina de Avenida Reforma casi esquina con Periférico. El empresario también estuvo en esa conversación.
López Obrador tomó la palabra: “Yo no conozco la agenda de víctimas, los necesito. Necesito que me ayuden”, recuerda Dayán.
En ese encuentro, los activistas y el entonces candidato presidencial pactaron celebrar un evento público el 8 de mayo de 2018 con las organizaciones civiles y las víctimas y un segundo encuentro, en septiembre si López Obrador ganaba las elecciones.
Y así fue. López Obrador llegó la primera semana de mayo a esa reunión en el Museo de Memoria y Tolerancia y ahí le propuso públicamente a Javier Sicilia que se convirtiera en el titular de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas.
“Yo le dije no iré a trabajar contigo. Te soy más útil afuera como un hombre crítico que orienta. Nosotros no hemos sido adversarios, hemos sido críticos de ciertas políticas, y no sé cómo definirlo para no usar la palabra traición, críticos por darle la espalda a una agenda que él se comprometió a cumplir”, expone en entrevista Sicilia.
Sin embargo, López Obrador sorprendió a la sociedad civil cuando a principios de agosto dio a conocer su idea de dar amnistía a algunos delincuentes.
Y luego anunció la realización de los foros para la pacificación del país y la reconciliación nacional, entre el 7 de agosto y el 24 de octubre de 2018. En medio de reclamos, el tabasqueño los inauguró en Ciudad Juárez, Chihuahua, con la frase: “Tenemos que estar dispuestos a perdonar”. De inmediato las víctimas lo interrumpieron con el grito de “nosotros no queremos perdonar. Justicia, justicia, justicia”.
Sicilia y Dayán acudieron a la casa de transición de López Obrador a mediados de agosto de 2018 para recordarle que uno de los pactos había sido reunirse nuevamente con ellos para trazar la ruta de la elaboración de la política de Estado para combatir la inseguridad.
Y López Obrador accedió. Este encuentro se realizó en el Centro Cultural Tlatelolco el 14 de septiembre. No vivió un día de campo.
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“¡Ni una más! ¡Ni una más! ¡Ni una asesinada más! No necesitamos dialogar, necesitamos encontrarlos… ¡Queremos que los encuentren! ¡Pónganse a trabajar! ¡Justicia, justicia! ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, fue el coro con el que las víctimas recibieron ese día al entonces presidente electo.
Ahí, las víctimas y las organizaciones convencieron a López Obrador para que el tejido de una propuesta de política pública dejara de estar en manos de Durazo y Loretta Ortiz.
El tabasqueño instruyó públicamente a Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración como encargado del tema, y luego los colectivos impulsaron a Jacobo Dayán como coordinador general de las mesas e interlocutor con el gobierno.
Las siete mesas de trabajo se realizaron durante aproximadamente tres meses. Participaron decenas de organizaciones de la sociedad civil, colectivos de víctimas, académicos y expertos nacionales y extranjeros, entre ellos el padre Alejandro Solalinde.
El espíritu de esa propuesta fue elaborar un modelo de justicia transicional.
Jacobo Dayán entregó la propuesta de justicia transicional a Alejandro Encinas. El subsecretario le comunicó que el 1 de diciembre de 2018, en la toma de protesta de López Obrador, se anunciaría la estrategia de justicia transicional, planteada por las víctimas y la sociedad civil para pacificar el país.
Incluso, Encinas solicitó a Dayán un plan para instrumentar algunas acciones en los primeros 100 días de gobierno.
López Obrador no presentó la estrategia elaborada por las organizaciones de la sociedad civil el 1 de diciembre. “Yo leí el discurso que iba a dar López Obrador, se trataba de la disculpa del Estado mexicano a las víctimas del país”, asegura Dayán.
Luego informaron que la presentación sería dos días después, el 3 de diciembre, durante el anuncio de la creación de la comisión de la verdad histórica de Ayotzinapa. Tampoco llegó el mensaje del tabasqueño.
En un último esfuerzo, se acordó que anunciarían la estrategia el 10 de diciembre de 2018, el Día Internacional de los Derechos Humanos. Pero el pleito que inició López Obrador ese día con el extitular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Luis González Pérez, por la ley de remuneraciones, cambió el rumbo de la historia.
||Con información de Elena Michel||
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