El dirigente estatal de Morena, Jacinto González Varona responsabilizó a la oposición y grupos fácticos de intentar desestabilizar Guerrero a través de hechos de violencia, como lo acontecido con la irrupción de un grupo armado en Tecpan.

González Varona señaló que su posición era política, y señaló que detrás de estos hechos estaba la oligarquía nacional e internacional que se oponía a que la izquierda gobernara.

Sin embargo, el líder de Morena señaló que no contaba con datos que pudieran probar sus dichos y que solo se trataba de una percepción.

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Aunque hizo referencia a las dirigencias nacionales de partidos como el PRI, PAN y PRD, dijo que esto se orquestó desde fuera del estado; recalcó que no podía decir que había habido participación de las dirigencias locales.

Dijo que esos sucesos de violencia que tuvieron percusión en la Costa Grande de Guerrero, tenia el objetivo de generar desestabilización y “nota roja”, sin embargo, expresó que debido a la actuación coordinada de las autoridades esto se pudo contener.

Se le preguntó si esta misma situación tenia que ver con el caso de los comerciantes asesinados originarios de Chautipan, a lo que respondió que eran temas diferentes, donde la situación tenía que ver con el control territorial de los grupos criminales.

Los comentarios del líder de Morena tuvieron repercusión en la dirigencia del PRI, quien pidió al dirigente que presente las pruebas ante las autoridades correspondientes y que no todo quedara en habladurías.

Casi a la par, González Varona emitió un comunicado en el que señaló que la ofensiva contra el gobierno de Evelyn Salgado Pineda provenía de la oligarquía nacional y que no había hecho referencia concreta a figuras políticas de Guerrero.

“Esta precisión es necesaria para evitar malinterpretaciones y reiterar nuestro compromiso con un diálogo, respetuoso y constructivo en el ámbito local”, indicó.