¿De vacaciones? Conoce el hotel ¡embrujado!

Pensado como uno de los lugares más exclusivos de Acapulco, este hotel se convirtió en un lugar de terror

Saúl Ávila | El Sol de Acapulco

  · viernes 30 de octubre de 2020

Foto: Saúl Ávila | El Sol de Acapulco

Es justo en el número 1718 de la avenida Gran Vía Tropical, en el fraccionamiento Las Playas de Acapulco, donde se encuentra desde hace décadas, completamente abandonado, el llamado condominio Delfín o Plaza Basurto, a finales de los años 70, comenzó la construcción de este espeluznante lugar, que en un principio se pensó que sería un hospital, después se dijo que serían dos torres de condominios exclusivos, con una vista espectacular a la bahía más hermosa del mundo.

Sin embargo, finalmente los propietarios del lugar deciden construir estas dos torres, en una de las exclusivas zonas de Acapulco, con el único fin de que comenzó la década de los años 80 se convirtiera en se convirtiera en el mejor y más exclusivo hotel de todo Acapulco, llamada condominio Delfín, aunque los documentos encontrados en el lugar indican que su nombre sería Plaza Basurto.

Foto: Saúl Ávila | El Sol de Acapulco

Con el arranque de la construcción, arquitectos, empresarios, invitados especiales y decenas de trabajadores se dieron cita para disfrutar de una ceremonia religiosa, seguida de una gran comida, bebidas, alcohol y música que se prolongó durante toda la noche.

Aunque el festejo había transcurrido sin contratiempos, fue en la madrugada cuando los ánimos de varios albañiles se incendiaron y comenzaron una fuerte pelea, llena de golpes, machetes y amenazas, a pesar de la histeria el problema no pasó a mayores, el festejó continuó y días después comenzó la construcción de estas dos torres, sin imaginar lo que sucedería posteriormente.

Los primeros días transcurrieron con normalidad, poniendo cimientos y comenzando las excavaciones, para poder llegar desde las alturas hasta la orilla de la bahía, donde se construiría el exclusivo embarcadero en donde se recibirían millas de visitantes.

Foto: Saúl Ávila | El Sol de Acapulco

Sin embargo una tarde, justo cuando todo se encontró en total silencio y tranquilidad, uno de los trabajadores permanecieron en el área construida del embarcadero haciendo sus labores, y hay quien dice que a escondidas disfrutaba de una helada cerveza, razón por la que sus demás compañeros sin decir nada continuaron con los trabajos de manera normal.

Pasado un rato dejó de escuchar de alguien trabajara alrededor del embarcadero, por lo que no faltó el curioso que fuera a asomarse, pensando encontrar a su compañero totalmente ebrio, pero la sorpresa fue mayor al no encontrar a nadie, sólo se apreció un sombrero flotando en el mar.

Los trabajadores de inmediato iniciaron la búsqueda de su compañero, pero nunca más fue visto ni su cadáver encontrado, lo más impresionante de este caso es que fueron alrededor de 5 muertes en condiciones similares en el embarcadero, por lo que se optó por dejar su construcción para el final de la obra.

Fue así como continuaron los trabajos de construcción en las dos torres, en donde constantemente y de manera sorpresiva alguno de los trabajadores caía de lo más alto, en algunas ocasiones directo al mar y otras veces en la parte baja de la construcción, donde sufrían una muerte espantosa.

Fueron tantos y tan constantes los accidentes, que poco a poco los empleados abandonaron de trabajar, y es que además de las caídas, también hubo casos en los que alguien se quitó la vida, pareció que en ciertos puntos de los edificios la gente enloquecía.

Foto: Saúl Ávila | El Sol de Acapulco

Y tal como pasa cuando la salación llega a un lugar, los empresarios y encargados de construcción de pagar los gastos de, pasaron por serios problemas económicos y familiares, a tal grado que poco a poco quedaron en la ruina, otros perdieron la vida en misteriosos accidentes , y los pocos que quedaron ya no les interesó continuar con el proyecto, es por eso que la obra quedó en total abandono.

A partir de ese momento suceden cosas extrañas, se han observado sombras, imágenes, ruidos y apariciones, incluso hay quien asegura que desde lo lejos se observa una sombra terrorífica que parece proteger el lugar. Personas que se han adentrado con el fin de descubrir algo paranormal simplemente no salen con vida o enloquecen horas después.

Por si fuera poco, el 11 de mayo de 2016 fue descubierto en una de las habitaciones, el cuerpo sin vida de un joven de 23 años, en total estado de putrefacción, su nombre era Francisco Adame Figueroa, quien trabajó como bailarín y fotógrafo, pero en los primeros días de ese mes fue secuestrado, y aunque su familia pagó el rescate el joven no fue entregado.

Foto: Saúl Ávila | El Sol de Acapulco

Vecinos entrevistados cuentan que frecuentemente se escuchan ruidos, voces ya veces hasta gritos, otros cuentan que han observado siluetas como sombras paseando por los cuartos, además en la noche han visto alguna luz y fogatas dentro de una propiedad.

En el lugar se percibe un ambiente de tristeza y dolor, al estar cerca se siente una sensación de ser observado, el llamado hotel del terror guarda en sus paredes un gran misterio, que quizás nunca se pueda descubrir.