La presidenta de la Organización Corazones Ambientalistas, Mónica Corazón Gordillo, consideró que las autoridades deben de colocar advertencias en las playas en donde existen todavía escurrimientos de aguas negras, para no exponer la salud de los bañistas.
Lo anterior lo expresó, tras que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), anunció que en unos días se dará a conocer el estado que guardan las playas del puerto de Acapulco, al respecto dijo que lamentablemente el problema de la contaminación todavía no se resuelve.
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Aseguró que los escurrimientos están a la vista de todos, tanto en la playa Papagayo, Condesa y Tamarindos, a la altura del río El Camarón, en donde diariamente miles de litros de aguas sucias llegan hasta el mar.
La ambientalista, Corazón Gordillo, reiteró que en el medio ambiente flota un cóctel de enfermedades, pero nadie hace caso, siguen los encharcamientos de aguas negras que brotan de las alcantarillas o de tubos fracturados, que generan fétidos olores.
A esto hay que agregarle que otro problema es la basura, que se sigue arrojando a la vía pública y acumulando en canales y arroyos, generando focos de infección, pero también exhibe la incapacidad de la dirección de Saneamiento Básico, para recolectar los desechos.
Por todo esto, dijo, que, con la llegada de miles de turistas al puerto de Acapulco, es necesario colocar advertencias en las playas en donde existen escurrimientos de aguas contaminadas que podrían ocasionar daños a la salud de los bañistas, “el riesgo es alto”, apuntó.
