A cuatro meses de la destrucción provocada por el huracán Otis, integrantes de los colegios de arquitectos e ingenieros del estado de Guerrero, urgieron a las autoridades de los tres niveles de gobierno, iniciar un programa de reconstrucción de la imagen turística de Acapulco.
Señalaron que el puerto, no puede seguir dando una imagen de destrucción, de desolación y de tristeza, por lo que se tienen que iniciar acciones que tengan que ver con la reconstrucción de edificios, hoteles, negocios, carreteras, mercados y sobre todo de los servicios públicos que también fueron afectados por el pasado huracán.
El arquitecto Artemio Rodríguez Peralta, indicó que el tiempo no puede ser parte fundamental para iniciar los trabajos de reconstrucción, sobre todo en un destino de playa donde su imagen es parte fundamental para atraer la corriente de turismo nacional e internacional.
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“Acapulco ya tiene que empezar su transformación real, los daños provocados por el huracán, debe de quedarse ya en el pasado y empezar el proceso de una verdadera reactivación donde se integre la rehabilitación de condominios, de los hoteles y de todos los negocios comerciales que representan turismo y recursos económicos, no debemos de seguir en el sistema de los pagos de los apoyos, de las despensas y de los enseres que también se han convertido en un problema social”, expresó.
Rodríguez Peralta, dijo que es urgente la reactivación real del puerto, iniciando con la reconstrucción de todas las áreas que aun siguen con la imagen de una destrucción que sucedió hace cuatro meses.
En este mismo sentido el ingeniero Arturo Sandoval Pineda, dijo que Acapulco si requiere de un apoyo especial, pero este debe de estar enfocado a la reconstrucción de su imagen turística, con edificios remodelados, condominios arreglados y los negocios en funcionamiento y generando miles de fuentes de empleo.
El ingeniero Arturo Sandoval, aseguró que el proyecto de reconstrucción de la ciudad, debe de iniciar con el sector más afectado como lo es el turístico en donde se considera la infraestructura de condominios, negocios y hoteles.
De acuerdo al titular de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil del estado, Roberto Arroyo Matus, las fuertes ráfagas de casi 300 kilómetros por hora con las que golpeo el puerto del huracán, dejó daños considerables en 602 hoteles y condominios, además de más de 450 palapas y más de 30 mil negocios comerciales en toda la ciudad.