Durante una reunión de evaluación de las acciones que se han emprendido para enfrentar la pandemia del Covid-19, la presidenta Adela Román Ocampo, dijo que trabajando unidos autoridades y ciudadanos, se podrá superar en Acapulco la emergencia sanitaria que mantiene detenida desde hace más de tres meses la economía del puerto.
Durante la reunión virtual que estuvo encabezada por el gobernador del estado Héctor Astudillo Flores, la primera edil de Acapulco, dijo que pese a todo, hay mucho optimismo de ciudadanos y empresarios para que el primero de julio el estado pueda entrar a la fase color naranja.
Roman Ocampo, dijo que hay una permanente capacitación en los distintos sectores de la sociedad en torno a las medidas sanitarias que se tienen que seguir para evitar más contagios de Coronavirus, "pero se está esperando únicamente la apertura de los negocios cuando las condiciones de riesgo establezcan dejar la fase roja que es de alerta máxima".
Dijo que durante el receso de actividades productivas, además de proteger a la población para reducir el número de infectados por el virus, los prestadores de servicios han sido capacitados por los tres órdenes de gobierno y organizaciones civiles, para aplicar los protocolos sanitarios requeridos en la “nueva normalidad”.
Lamentó también que Acapulco, siga siendo el municipio con el mayor número de casos positivos de Covid-19, así como en fallecimientos, por lo que pidió redoblar los esfuerzos para reducir la curva de contagios en está semana que es crucial para cambiar a color naranja y pensar ya en la reapertura de algunos negocios que se han mantenido cerrados por la pandemia.
Por último el mandatario estatal reconoció el gran trabajo en Acapulco realizado desde el inicio de la emergencia sanitara por parte del Ayuntamiento, bajo el liderazgo de la presidenta municipal Adela Román. “En verdad, ha sido el lugar más complejo, más difícil, más laborioso, por eso, mi reconocimiento”, remarcó Astudillo.