La basura que genera la propaganda política que instalan partidos para promover la imagen de sus candidatos a cargos de elección popular, no solo representa una violación a la ley en materia ecológica a nivel nacional, sino también un riesgo de contaminación al medio ambiente, debido al tiempo que tarda en degradarse el tipo de material que es utilizado.
De acuerdo a ecólogos en Acapulco, todo el material de plástico que se utiliza de manera desmedida y fuera de la ley por parte de los partidos políticos, al término de cada proceso electoral va a parar a las distintas playas del puerto, los ríos y las lagunas provocando la muerte de especial marinas, además de una gran cantidad de flora y fauna, y se suma la generación de enfermedades como el cáncer entre los ciudadanos.
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La ecóloga Vivian Huerta Hernández, integrante de la asociación ecológica Aca Eco, dijo que en Acapulco existe una sobre población de propaganda de plástico que se tiene en toda la ciudad en este proceso electoral, por lo que pidió a las autoridades proceder ya que no está regularizada por el daño ecológico que provocan a todo el medio ambiente y a la propia salud de los ciudadanos.
Consideró que fuera de los daños que dejó el pasado huracán Otis, y que hasta el momento no se ha podido concluir con el proceso de limpieza de la ciudad, hoy en día en Acapulco, se tiene otro huracán llamado propaganda electoral o basura electoral que es la que más afecta por el tiempo que dura el plástico en degradarse.
“Según los expertos en la material, el plástico de los anuncios espectaculares, lonas y todo tipo de propaganda que utilizan los partidos políticos para promover a sus candidatos y no sus propuestas para mejorar la ciudad, tarda 100 años en degradarse, es un huracán de basura política que va a parar al mar, a los ríos y a las lagunas ocasionando un serio problema de contaminación y muerte de especies”, dijo.
Vivian Huerta, manifestó que no solo es un problema de contaminación la propaganda política, sino también de un gasto excesivo de recursos económicos que se destinan para sacarla del mar, de los ríos y de las lagunas una vez que esta llega a estos espejos de agua.
Lamentó que se siga utilizando este tipo de propaganda por parte de los candidatos y los partidos políticos, cuando no representa ninguna propuesta solo gasto económico millonario y problemas serios de contaminación al medio ambiente de toda una ciudad y de la población que también es víctima de enfermedades como el cáncer a consecuencia de este material.
El artículo 155 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, determina la prohibición de todo tipo de propaganda que ponga en riesgo la visualización de un paisaje o un área pública de una ciudad, esto representa sanciones que equivalen a 45 UMA unos cuatro mil 500 pesos.
La defensora del medio ambiente, dijo desconocer qué cantidad de basura política, se puede generar en un proceso electoral, pero sí dejó en claro que esta tiene un mal proceso de recolección por parte de las autoridades, por lo que consideró que debe de regularse para evitar, el riesgo de contaminación.
Por otro lado, respaldo la propuesta que partidos políticos y candidatos a un cargo de elección popular, promuevan su imagen a través de programas de reforestación o de donación de árboles que se requieren en este momento para reactivar la flora y fauna de la ciudad.