Será después del primer trimestre que se haga el ajuste al incremento al kilo de la tortilla, confirmó el vocero de los industriales de la Masa y la Tortilla de Guerrero, José Popoca Jaimes.
Esto ocurre tras darse a conocer que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público informó a través del Diario Oficial de la Federación, la actualización de las cuotas del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), a los refrescos, cigarros, gasolina y diésel de 7.779 por ciento para este 2023, que impactará aún más la inflación.
El entrevistado explicó que las 6 mil 557 tortillerías que hay en este estado suriano, harán todo el esfuerzo en mantener los costos de este insumo de la canasta básica, a la espera del comportamiento de la inflación, conscientes de que será un nuevo golpe al poder adquisitivo de los consumidores.
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Por lo que, los precios del kilo de la tortilla se mantendrá dentro de los 24, 25 y 30 pesos, pero después del primer trimestre se hará un estudio socio económico y dependerá de esto el alza que van aplicar en este año.
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El vocero Popoca Jaimes dijo que en lo que respecta a Guerrero, el presidente de los industriales de la Masa y la Tortilla del Estado, Arcadio Castro Santos, está a la espera de las mesas de trabajo con el gobierno federal y del estado, en las que se habrá de tomar las decisiones sobre los ajustes que se tendrán que hacer en este 2023.
Aclaró, que también van a proponer los mecanismos que coadyuven a frenar el alza a su producto, pero también están a la espera de la cosecha del maíz, que iniciará a partir del 15 de enero, pues si tienen abasto suficiente del grano, no moverán los costos.
Sin embargo, si no hay suficiente producción del maíz, entonces tendrán que traerlo del Bajío o Sinaloa, tendrán que pagar el flete que es de 11 a 12 mil pesos por tonelada, lo que propiciará que se vean obligados a aumentar el kilo de la tortilla, como seguramente lo harán otros productos de primera necesidad.