Desérticas, vacías, sin turistas ni tampoco comerciantes lucieron las principales playas de Acapulco en este inicio de la temporada vacacional de Semana Santa, en plena emergencia sanitaria por el coronavirus que afecta a todo el país.
En un recorrido por la zona de Caleta y Caletilla, así como el Asta Bandera, se constató que, surgió efecto la medida de cerrar los balnearios para uso recreativo como una acción radical pero necesaria para detener el contagio de esta enfermedad.
Aunque el gobierno del estado anunció un operativo de vigilancia por parte de la Guardia Nacional, Policía Estatal y municipal en la franja de arena para evitar que, turistas y residentes utilicen las playas, hasta el medio día de este viernes no se observó a ninguna autoridad.
En la zona del asta bandera un grupo de cinco agentes de la Guardia Nacional pasó por el lugar, pero informaron que, no tenían instrucciones de cuidar las playas ni evitar que los ciudadanos ingresaran, pero que preguntarían a sus mandos superiores.
Asimismo, elementos de la Promotora de Playas, retiraron mobiliario y toldos de la zona del Asta Bandera, Caleta y Caletilla, así como Icacos, y los instalarán hasta el 01 de Mayo, cuando se abran las playas al público.