Prestadores de servicios turísticos, campesinos, empleados del sector salud, maestros sindicalizados y trabajadores del ayuntamiento que pertenecen al SUSPEG, realizaron protestas en la avenida costera Miguel Alemán y calles aledañas al Parque Papagayo y la Octava Regional Naval para exigir ser escuchados por el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su visita al puerto de Acapulco.
Desde temprana hora de este viernes 14 de agosto, los distintos grupos iniciaron a movilizarse por la zona turística donde colocaron pancartas y lonas con sus peticiones, siendo los trabajadores de playas quienes iniciaron a concentrarse en el lugar donde mantienen un plantón desde hace tres días, con la exigencia un reordenamiento de playa inclusivo, ya que en semanas anteriores fueron desalojados del área donde rentaban mobiliario.
Por otra parte, integrantes de distintas organizaciones campesinas se hicieron presentes en la avenida costera, con la solicitud de mayor atención al campo y denunciando que el programa de fertilizante gratuito tiene problemas, además de que se debe apostar a la producción de forma orgánica.
Integrantes de la asociación Músicos Unidos de Acapulco Guerrero (MODAG) también se hicieron presentes con su particular forma de manifestarse a través de canciones, con las cuales buscaron ser escuchados por el mandatario federal para que destine apoyos económicos o en especie para los integrantes del sector que no ha logrado obtener ingresos económicos desde inicios de la pandemia por el Covid-19 y a la fecha se encuentran desesperados.
Del mismo modo se fueron sumando agremiados al SUSPEG y profesores sindicalizados, con la demanda de que no se haga obligatorio el pago del ISR en las prestaciones como vacaciones, tal como ya se hizo efectivo a los sindicalizados del Ayuntamiento y que motivó una serie de manifestaciones radicales.
Un grupo de manifestantes logró bloquear la camioneta donde viajaba el presidente López Obrador para pedirle audiencia, sin embargo, el convoy no detuvo su camino y el personal de seguridad abrió paso entre los manifestantes furiosos porque sus demandas fueran atendidas.