Empresarios de la zona diamante de Acapulco, solicitaron apoyo a los tres niveles de gobierno, debido a que las ventas y los altos cobros de la Comisión Federal de Electricidad durante los últimos meses han mermado la economía de muchos pequeños restaurantes.
El presidente de la asociación de Restauranteros de San Andrés Playa Encantada, Uriel Peláez Herrera, aseguró que las ventas en los últimos meses han dejado “mal parados” a los pequeños restaurantes de playa y laguna, cuyos trabajadores han sido los principales afectados por la falta de propinas.
El dirigente consideró que los tres niveles de gobierno deberían brindarles apoyos económicos como el que se brindaba con el programa empleo temporal en la anterior administración federal, con la finalidad de mejorar la situación de la zona diamante del municipio.
“El gobierno debe abrir las ventanillas para obtener unos proyectos, algo así como empleo temporal, muchas cosas con las cuales nos podamos ayudar a nuestra gente, porque las lluvias nos han afectado y esto se va a mejorar hasta diciembre”, dijo.
Así mismo, el representante de los restauranteros de playa Bonfil, Margarito Pinzón, destacó que se encuentran esperanzados en que la temporada decembrina llegue con mucha derrama económica, debido a que los pagos de impuestos como el del servicio de la energía eléctrica han mermado severamente su economía y solo la llegada de una gran cantidad de turismo al municipio puede salvarlos de los números rojos en los que se encuentra.