A pesar de que la práctica está prohibida por las autoridades municipales, decenas de familias instalaron instalaron por lo menos 38 casas de campaña para recibir el año nuevo durmiendo sobre las playas de Acapulco, sin tener que pagar una habitación de hotel.
Desde hace algunos días, grupos numerosos de paseantes habían sido vistos acampando en la explanada del mercado Santa Lucia frente a la playa Caletilla, así como en balnearios de la zona tradicional del puerto, de dónde habían sido retirados por elementos de la Policía Turística.
La noche de este martes durante un recorrido por la franja de arena, fueron detectadas un total de 38 casas de campaña armadas en las playas Dominguillo y Suave, donde sus ocupantes montaron hasta tendederos de ropa para recibir el año nuevo apreciando la gala de pirotecnia y la luz de la luna.
La mañana de este miércoles, fueron vistas otras tres casas en las playas Tlacopanocha y Hamacas, donde familias de turistas de escasos recursos descansaron tendidos en la arena y fueron arrullados por el sonido las olas.
En esta ocasión, los integrantes de la Policía Turística no hicieron intento por retirar la práctica que ha estado prohibida, por lo que los paseantes durmieron con total libertad, mientras que satisfacieron sus necesidades fisiológicas donde y como pudieron.
Cabe mencionar que en años anteriores, estás personas eran reubicados al parque Papagayo y a la Unidad Deportiva Acapulco, con la finalidad de que no orinen y defequen en la arena.