Los 26 puentes que hay en Acapulco revisten un importante desgaste y fatiga en sus juntas constructivas, algunos han ameritado su cierre temporal para darles "una manita de gato".
Los puentes Bicentenario, Vicente Guerrero, Colosio, Puerto Marqués, Cayaco, Base, Mozimba Vía Rápida y Cruces, que son los que registran una mayor carga vehícular, su estado es de marcado deterioro.
Las quejas de los automovilistas son frecuentes porque circular por estas plataformas tienen que transitar por baches y experimentar pasar por un tope debido a la marcada separación de las juntas constructivas.
Si bien es cierto, no representan riesgo alguno para la seguridad de los vehículos, pero sí requieren que se les de mantenimiento en el corto plazo, coincidieron los expertos de la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC).
Cabe recordar que la alarma se disparó a partir de la segunda semana del mes de octubre del año en curso, a raíz de que se difundió a través de las redes sociales la separación de las juntas constructivas del puente Bicentenario, que sacó a la luz años de abandono.
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En ese momento la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del municipio de Acapulco, Luz María Meraza Radilla, aclaró, que en efecto, el puente Bicentenario no presentaba ningún daño estructural y tampoco el resto de los viaductos que hay en distintos puntos de la ciudad.
La explicación técnica de lo que ocurre en estas plataformas de concreto, es que durante años no les dieron mantenimiento y con el constante paso de los vehículos provoca vibración y ocasiona la separación de las planchas de concreto.
Precisamente, esto ha obligado a cerrar los puentes, como ocurrió con el Vicente Guerrero, Colosio, Cayaco, Puerto Marqués, Vía Rápida y Bicentenario, a los que sólo se les aplica una "manita de gato".
En ese sentido el dirigente de la AMIC en Guerrero, Daniel Álvarez Añorve, indicó que ingenieros y arquitectos de su agrupación participaron en la revisión de las estructuras de los puentes y corroboraron que no hay daños estructurales.
Sin embargo, sí observaron que algunos presentan desgaste en la superficie de rodamiento y separación de las juntas constructivas, que se debe al paso constante de los automotores y por la falta de mantenimiento.
El experto Álvarez Añorve indicó que esto tiene reparación y en estos casos se utiliza un material que se llama neopreno, se coloca entre las separaciones de los bloques y actúa como cojinete y absorbe las vibraciones.
Ante el desgaste de este material los automovilistas al pasar, tienen la experiencia de pasar por un tope, por eso se debe darles mantenimiento, porque si se deja por más tiempo la separación de los bloques puede ampliarse y crear problemas a la circulación vehícular.
La titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del municipio, María Meraza Radilla, insistió que no hay riesgo alguno en estos momentos y calificó de información errónea que ha circulado por el estado físico que guardan los puentes.
Por lo pronto, anunció que el próximo año, sin dar una fecha exacta, se rehabilitarán los 26 puentes que hay en la ciudad y se destinará un presupuesto de 25 millones de pesos que ya se etiquetaron del presupuesto del ejercicio fiscal correspondiente al 2023.