Tras la entrada en vigor de las nuevas medidas sanitarias por el semáforo epidemiológico de color rojo, la Iglesia católica en Acapulco exhortó a parejas, así como a padres y padrinos de quienes serán bautizados, postergar las celebraciones para cuando disminuya el riesgo de contagio de Covid-19.
Mediante una misiva, el arzobispo de la Diócesis Acapulco, Leopoldo González González, mencionó que en la religión católica la población es muy proclive a realizar fiestas con este tipo de celebraciones.
Ante ello, recomendó a la población que con el retroceso en el semáforo, “volvamos a las normas que teníamos en relación a la administración de Sacramentos en etapas anteriores”
Llamó a los sacerdotes a que en confirmaciones y primeras comuniones pidan “a los papás y padrinos se comprometan con documento escrito que no harán fiesta” para evitar las concentraciones y generar un posible brote de casos de la pandemia.
Sugiere que “en las comunidades y municipios donde es posible haya un acuerdo con las autoridades civiles y el documento de compromiso se les haga llegar” y refiere que “a quienes deseen celebrar la alegría del Sacramento con una fiesta, hemos de pedirles que difieran la celebración del Sacramento para cuando sea menor el riesgo de contagio”.
Recordó que en “el Sacramento del Bautismo y el Sacramento del Matrimonio en nuestra región de ordinario están muy ligados a la fiesta, por ello es mejor diferirse para cuando se pueda tener la fiesta”.
Monseñor González González, precisa que el Sacramento del Bautismo no puede ser negado en caso de urgencia o peligro de muerte, mientras que “el Sacramento de la Reconciliación hemos de celebrarlo con todas las medidas de prevención, preferible el uso de careta”.
Abundó que a partir del lunes 9 de agosto, hasta el lunes 22 del mes en curso, y debido a que el color rojo nos indica que el riesgo de contagio es máximo, las misas en la Catedral e iglesias de la Diócesis, serán de siete de la mañana a seis de la tarde con un aforo del 40 por ciento.
“Las celebraciones y reuniones en nuestros templos serán con un aforo del 40% y el horario será de las 7 a las 18 horas, todas ellas con las medidas preventivas que hemos venido observando: Cubrebocas, uso de gel, distancia al menos de metro y medio, evitar toda aglomeración dentro y fuera del templo, por ello no son posibles las peregrinaciones, las ferias y festejos por fiestas, comentó.
Convocó a los párrocos que sigan motivando a recibir la vacuna a las personas adultas que no lo hicieron y a los jóvenes que les irá tocando para evitar que se propague más la enfermedad, porque hay algunos casos que son asintomáticos y pueden ser vehículos de contagio.
