Las complicaciones en el camino y falta de transporte hacia el Cerro del Encinal, así como las labores de limpieza y reconstrucción de hogares que aún realizan cientos de familias acapulqueñas por el paso de Otis, provocó falta de quórum y pospuso la celebración de la Santa Misa realizada anualmente en el Cristo Rey de la Paz.
El párroco Juan Carlos Flores Rivas informó que, pese a que se convocó a los feligreses, no respondieron al llamado debido a que la invitación fue muy apresurada, con un día de anticipación, aunado a que la gente aún no tiene en las mejores condiciones sus viviendas.
Lea también: Llama Iglesia a fortalecer la mala imagen de Acapulco tras saqueos
Dijo que dicha eucaristía se iba a celebrar el pasado sábado, en el inicio del camino de terracería donde se ubica la primera estación del Viacrucis, debido a que el otro tramo es complicado subir porque la mayoría de los árboles se cayeron y no se tiene sombra.
Lamentó que, tras el meteoro, el viento derribó el torso y parte de una mano del Cristo Rey de la Paz, el cual es una representación religiosa en una sola pieza de una tonelada y media, que fue colocada a 690 metros sobre el nivel del mar, frente a la bocana de la bahía de Santa Lucía.
Flores Rivas informó que en su momento solicitará los trabajos con grúa para que esta sea reparada, así como los trabajos de limpieza para celebrar el próximo 23 de diciembre el nacimiento de Jesucristo.