El día nublado advertía lluvias para Acapulco este domingo 16 de junio, fecha en que se festeja el Día del Padre, sin embargo, los panteones de la ciudad poco a poco fueron registrando una mediana presencia de familiares que acudieron a dejar pequeños ramos de flores y algunas veladores a la tumba fría de ese ser que contribuyó en formar pequeñas y grandes familias.
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No fue como el Día de las Madres, donde las tumbas de los panteones hasta brillan al ser lavadas, pintadas y forradas con grandes ramos de rosas y cartinas de papel multicolores; hoy al padre solo una visita de una hora y un ramo de flores que marcan una gran diferencia en la celebración.
Los panteones privados al igual que los municipales, registraron una buena pero no abundante afluencia este domingo 16 de junio, muchas de las tumbas solitarias, olvidadas y en un abandono total pese a que algunas de estas tenían marcadas fechas recientes de personas (hombres) sepultadas.
En esta ocasión, no se vio la convivencia de las comidas de familias sobre las tumbas recién adornadas; fue muy escasa la presencia de los famosos tríos que abundan en otras fechas en los camposanto ofreciendo las canciones tradicionales para la mamás que se adelantaron.
Los panteones fueron abiertos este domingo desde las 08:00 de la mañana hasta las 07:00 de la tarde para festejar a los padres que se adelantaron en el camino.
En Acapulco, hay más de 119 panteones, cuatro de estos son administrados por el municipio dos son privados y más 100 están ubicados en distintas comunidades del puerto de Acapulco que son propiedad de los ejidos.
