Son buenas noticias que las playas estén limpias y aptas para el uso recreativo, pero salta la duda en que condiciones están las áreas en donde siguen los escurrimientos de aguas residuales.
Esta fue la interrogante que se hizo la presidenta de la Organización Corazones Ambientalistas, Monica Corazón Gordillo, quien aclaró que no es su intención llevarle la contraria a las instituciones que miden la calidad de las aguas.
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Sin embargo, recordó que hace unos días el personal de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (CAPAMA) clausuró un condominio por verter las aguas del drenaje a la playa.
Además, dijo Corazón Gordillo, que es curioso que tampoco se diga nada si se levantaron pruebas en los canales y desagües por donde todos los días llegan las aguas crudas al mar.
Insistió que no pretende contradecir a las autoridades que ahora anuncian con bombos y platillos que las playas de este destino de playa están limpias, cuando la realidad no es posible ocultarla.
Solo espero que en esta temporada de vacaciones de Semana Santa no se presenten casos de afectación a la salud de los bañistas por nadar en áreas donde llegan las aguas residuales, indicó.
Por cierto, lamentó que ninguna mención se hiciera de las lagunas de Tres Palos, de Coyuca de Benítez y la laguna negra de Puerto Marqués, que agonizan ante la indiferencia de las mismas instituciones que ahora presumen que las playas de Acapulco están limpias.