Bajo una fuerte presencia de la Marina, Guardia Nacional y Policía Turistica, personal de Profepa y Semarnat, colocaron sellos de clausura y cerraron con una malla metálica toda la franja de la playa Manzanillo, para impedir el acceso a propios y extraños.
La acción se llevó a cabo bajo un total hermetismo del personal federal, quienes se limitaron a ir colocando el alambrado desde el lindero del Pescador a los límites de la playa Honda, así como los sellos de clausura.
La acción en todo momento fue vigilada por los militares, Guardia Nacional y turísticos, que mantenían un cerco en todo el perímetro en prevención de algún intento de impedir la clausura de la playa por parte de los cooperativistas y restauranteros de la zona.
Se trató de obtener información con los empleados federales, pero se limitaron a decir que no estaban autorizados a dar declaraciones y que todo se consultara en la delegación.
Elementos de la Policía Turística informaron a los pocos bañistas que se iba a colocar la malla metálica en todo el perímetro de la playa, pero podían salir por los costados.
La clausura de la playa provocó malestar de los restauranteros, quienes reprocharon que se cierre una playa icónica del Acapulco Tradicional.