A pesar de los esfuerzos de las cuadrillas de la dirección de Saneamiento Básico, el tiradero clandestino de la calle Morelos, en la unidad Habitacional Luis Donaldo Colosio, continúa recibiendo grandes toneladas de basura a distintas horas del día, problemática que se agudiza como un foco de infección por un enorme brote de aguas negras proveniente de un desperfecto en el sistema sanitario a unos metros.
Durante un recorrido por Rinconada del Mar, se logró constatar que el acumulamiento de desechos sólidos en la mencionada calle, la cual es colindante con casas habitación y un asilo de ancianos, continúan bolsas con desperdicios de casa habitación, lo cual se alarga a terrenos aledaños que también son contaminados por los llamados “pechugueros”, quienes recolectan la basura en los hogares por unos pesos.
Los olores fétidos de conjuntan en esta zona, puesto que a casi 200 metros del lugar que funge como basurero y en donde en distintas ocasiones se ha retirado basura con camiones recolectores, prevalece un registro sanitario en malas condiciones, de donde brotan aguas con pútrido olor y pedazos de lo que pareciera excremento humano, olor que se conjuga con la descomposición de la basura.
Los vecinos y locatarios informaron que el brote no es reciente y que la autoridad nada ha hecho para que esto sea solucionado, a pesar de que a unos metros del se ubican las instalaciones de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Acapulco (CAPAMA).
Cabe mencionar que autoridades de la Secretaría de Salud en Guerrero podrían reactivar las alertas sanitarias, al igual que imponer una multa al Ayuntamiento porteño, si este no es capaz de resolver la problemática que puede detonar enfermedades gastrointestinales a los habitantes de los asentamientos aledaños a los focos de infección.
