Las rejillas que se ubican en la distintas calles del primer cuadro de la ciudad, se han convertido en un peligro latente para los acapulqueños y turistas debido al mal estado en el que están se encuentran.

Algunas de estas alcantarillas que en un momento, fueron instaladas para cubrir los pozos por donde pasa el agua residual de los negocios establecidos, y otros donde se ubican cables de energía eléctrica, hoy están viejas, alzadas y en malas condiciones.

Lea también: Rejillas de CFE, trampas mortales para peatones

Comerciantes establecidos de las calles La Paz y José María Iglesias, aledañas al zócalo de Acapulco, indicaron que ante la falta de interés que han mostrado las autoridades para reparar las alcantarillas, se han colocado han colocado algunos objetos que sirven como señalamientos de peligro.

Esteban Ruiz Gómez, comerciantes en calle La Paz, dijo que las rejillas ya son más de riesgo que de seguridad por el mal estado en el están.

“Son un peligro, la lámina de metal está alzada y si una persona no las ve puede cortarse el pie, y esto es poco pueden caer sobre la gran cantidad de cables que se encuentran abajo de la lámina, creo que si es necesario que se haga algo para repararlas, y así poder evitar cualquier tipo de accidentes que se pueda lamentar”, dijo.

Señaló que en todas las calles aledañas al zócalo de la ciudad, se encuentran las alcantarillas algunas se les colocaron pedazos de sillas de plástico, y a otras algunos pedazos de postes de concreto, para evitar que las personas puedan caminar sobre estas.

Ruiz Gómez, dijo que han estado solicitando la reparación de las rejillas desde hace varios meses desde haberes del paso del huracán Otis, sin tener un resultado favorable por parte de las autoridades de empresas como Telmex y la Comisión Federal de Electricidad.