Padres de familia y alumnos bloquean la avenida Cuauhtémoc

En punto de las 10:00 de la mañana, el grupo de inconformes salieron de su escuela y se instalaron en ambos carriles de esta importante avenida

Celso Castro Castro

  · martes 3 de septiembre de 2019

Foto: Martín Gómez | El Sol de Acapulco

Con el propósito de exigir que se les construya un nuevo edificio, en virtud de que su plantel fue dictaminado como inhabitable por los sismos del 2017, alumnos y padres de familia de la Escuela Primaria “Benito Juárez”, ubicada en la colonia Garita, bloquearon la avenida Cuauhtémoc y el entronque con Farallón, provocando un severo congestionamiento.

En punto de las 10:00 de la mañana, el grupo de inconformes salieron de su escuela y se instalaron en ambos carriles de esta importante avenida, para impedir el paso de vehículos y presionar a las autoridades del gobierno del estado, para que les construyan una nueva escuela.

El director del plantel, Juan Carlos Piza Nieves, en entrevista denunció que, debido a los sismos ocurridos en el 2017, su escuela resultó afectada en su estructura, principalmente los salones de clases, por lo que el personal de Protección Civil al realizar la inspección dictaminó que era inhabitable, pero al no tener donde ir, siguieron usándolo.

Los manifestantes, con cartulinas y lanzando consignas, mantuvieron el bloqueo por espacio de casi una hora, al tiempo que exigían que se les construya una nueva escuela, por lo que advirtieron que no iban a retirarse hasta que se atienda su demanda.

Además, los padres de familia consiguieron el salón de eventos Zumpango, ubicado en la avenida Farallón, para que ahí les dieran clases, por lo que este lunes los padres de familias llevaron sillas, mesas y demás artículos, pero de último minuto les avisaron que no podían ingresar y que este martes tenían que regresar por sus pertenencias.

Por lo que acordaron protestar, luego que también el mismo el delegado de los Servicios Educativos de la Región Acapulco-Coyuca, Alejandro Slimovich, les dijo que no podían seguir utilizando el inmueble y que la escuela tenía que ser reubicada.
Señalaron que son 650 alumnos de los dos turnos y más de 40 maestros, así como personal administrativo, que son afectados y tampoco les permiten volver al plantel, por lo que afirmaron que no van a ceder en su demanda.