Al igual que playa Manzanillo, la conocida Playa Honda ubicada a escasos metros del club de yates en la zona Tradicional, se ha convertido en un cementerio de embarcaciones que fueron destruidas por el huracán Otis, ocurrido la noche del martes 24 y madrugada del miércoles 25 de octubre.
Son más de 50 las embarcaciones entre yates de lujo, así como lanchas que eran utilizadas para la pesca y pequeños catamaranes, los que fueron arrastrados por los fuertes vientos de Otis, hasta la zona de playa donde a poco más de dos meses, siguen estando en está área a la que ya no llegan visitantes ni acapulqueños.
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Según don Juan Aparicio, pescador y propietario de una pequeña lancha de dos motores devastada por el huracán, las embarcaciones que quedaron en Playa Honda, están totalmente destruidas, y no tienen arreglo alguno, sólo tres o cuatro yates grandes que pudieran contar con un seguro de daños cubierto por sus propietarios con alguna aseguradora.
A Playa Honda, hasta antes del huracán, llegaban turistas y acapulqueños a disfrutar de su cálida agua azul, y desde el pasado 25 de octubre se encuentra convertida en un gran cementerio de embarcaciones, mismas que también representan un riesgo de contaminación.
Las lanchas y los yates quedaron destruidas, algunas encimadas unas a otras, con motores descompuestos, pedazos de fibra de vidrio desprendidas de las grande cúpulas de los barcos, algunos vidrios quebrados, material metálico sobre las rocas y arena, además de restos de maderas que hoy flotan sobre el mar.
“Tenemos más de un mes, esperando la ayuda de las autoridades, por lo menos para poder arrastrar a la orilla de alguna playa lo que quedó, para después trasladarlas a un lugar para ver si se pueden recuperar, o de plano dejarlas en el olvido, son muchas las embarcaciones que fueron destruidas por el fuerte huracán, a mi lancha, ya le robaron algunas piezas del motor, pero no tengo para llevarla a la orilla, y voy a seguir esperando la ayuda”, dijo don Juan.
De acuerdo a las autoridades de Capitanía de Puerto, el huracán Otis, devastó poco más de 700 embarcaciones grandes y pequeñas de un padrón oficial que rebasa las más de siete mil que hasta antes del fenómeno meteorológico se encontraban navegando por las playas de Acapulco.
Además de Playa Honda, otra de las playas de Acapulco donde se registran embarcaciones destruidas a poco más de dos meses del paso del huracán, son Manzanillo, así como parte del Malecón frente al zócalo de la ciudad.