El arzobispo de la Arquidiócesis de Acapulco, Leopoldo González González, ofreció el acompañamiento de la Iglesia Católica para con las familias de los seis policías estatales que fueron emboscados en el municipio de Zihuatanejo el pasado martes.

Durante su tradicional conferencia de prensa dominical en la Catedral de Nuestra Señora de la Soledad en el Zócalo porteño, expresó su dolor y tristeza por las familias de los uniformados que fueron asesinados cuando regresaban de otorgar medidas cautelares a familias desplazadas por la violencia que se registra en la Tierra Caliente.

El prelado católico ofreció su cercanía para lograr atravesar por el duro momento que representa la pérdida de sus seres queridos y pidió que se actúe con justicia ante tan doloroso acontecimiento, recalcando que la impunidad hace mucho daño al dejar desprotegida a la sociedad.

“De una manera especial expreso mi cercanía a los familiares de quienes perdieron la vida cumpliendo su misión de velar por la seguridad de la sociedad, pido al Señor por el eterno descanso de quienes han sido asesinados y por la paz y el consuelo de sus seres queridos”, declaró.

González González reiteró su llamado a la conversión de quienes han encontrado un modus vivendi en la delincuencia, para que estos alcancen el perdón de Dios.

Por otra parte, sobre el debate presidencial, aseguró que es una ingenuidad que los ciudadanos piensen que una persona vendrá a resolver sus problemas, pues aseguró que los retos tienen que ser enfrentados en unidad y con corresponsabilidad inclusiva de los porteños.