Empresarios de bares y discotecas de la zona turística de Acapulco, advirtieron que, en caso de concretarse la pretensión del reordenamiento en los horarios de funcionamiento, cientos de negocios podrían cerrar, debido a que el nuevo cobro que se les realizaría, se sumará a la cuota que pagan a la delincuencia organizada para poder operar hasta la madrugada sin ser molestados.
En declaraciones de manera anónima, el concesionario de un bar que se ubica sobre la Costera Miguel Alemán a la altura del fraccionamiento Magallanes, señaló que, de concretarse la restricción declarada por el titular de la dependencia antes mencionada, Isaías Arellano Maldonado, negocios como el suyo tendrían pérdidas económicas “muy fuertes, ya que es después de la 1:00 de la madrugada cuando se generan más ventas”.
Consultado por separado, el presidente de la Federación de Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo (Fecanaco) en Guerrero, Alejandro Martínez Sidney señaló que más de 150 negocios con estos giros son víctimas de la delincuencia, la cual no se combatirá restringiendo los horarios de funcionamiento y, por el contrario, la medida podría ahuyentar al turismo, por lo que solicitó una mesa de trabajo con la alcaldesa Adela Román Ocampo.
“Como Cámara estamos de acuerdo en que se dé una regularización en cuanto a las licencias de funcionamiento y demás lineamientos que algunos negocios incumplen en la zona turística, pero reducir los horarios de funcionamiento será un certero golpe. Acapulco se dio a conocer a nivel internacional por su vida nocturna. Lo que necesitamos es seguridad, no restricciones”
Alejandro Martínez Sidney
Agregó que el limitar el horario de funcionamiento, a la 1:00 para los bares y a las 5:00 para las discotecas, podría significar “un toque de queda para los turistas”, lo cual será el “tiro de gracia” para aquellos que viven directa o indirectamente de este sector, al verse vulneradas cientos de fuentes de empleo.