El secretario de Protección Civil en Guerrero, Marco César Mayares Salvador, advirtió que es responsabilidad de los municipios notificar a las familias que habitan zonas de alto riesgo, para ser reubicadas y evitar que sean víctimas de los fenómenos naturales, como las lluvias que comenzarán el próximo mes de mayo en toda la entidad sureña.
Entrevistado en Acapulco, el funcionario estatal, aseguró que en todo Guerrero hay poco más de 50 mil ciudadanos habitando zonas de riesgo como barrancas, franjas de ríos o laderas inestables, por lo que las direcciones de Protección Civil de cada municipio deben actuar y hacer valer la ley para evitar desgracias.
“Lo de las notificaciones es responsabilidad municipal, tenemos que tomar medidas especiales para garantizar su seguridad, incluso medidas ejecutorias, para evitar que se sigan asentando en zonas de alto riesgo, porque arriesgan la seguridad de sus familiares”, explicó.
Mayares Salvador, señaló que los municipios no deben otorgar permisos de asentamiento en estas zonas, así como áreas inundables, y deben evitar que líderes sociales invadan terrenos que no son habitables y lleven a familias de escasos recursos a vivir ahí, sabiendo que las ponen en riesgo y su vida peligra.
Recordó los eventos del 2013, donde los fenómenos naturales Ingrid y Manuel provocaron inundaciones en varias regiones del estado, afectando principalmente la zona Diamante de Acapulco, donde cientos de familias resultaron afectadas, perdieron muebles, artículos electrónicos y pusieron en riesgo su vida.