No hay Tlacololeros sin el pitero y su tambor

Carlos Catalán Flores, originario de Zumpango, es músico folclórico de la danza de Los Tlacololeros y con su flauta hecha de bambú o carrizo y su tambor con forro de cuero de animal, hace vibrar a los que lo escuchan

Adriana Covarrubias | El Sol de Acapulco

  · domingo 1 de agosto de 2021

Adriana Covarrubias | El Sol de Acapulco

Cuando la flauta y el tambor comienzan a sonar, anuncia el arranque de la danza de los Tlacololeros , que es considerado como patrimonio cultural de Guerrero, porque es la representación más antigua con más de 128 años de tradición.

Escuchar este sonido, te hace vibrar el corazón al revivir la tradición de esta danza que sigue preservando y que se baila para pedir por las lluvias y mejores cosechas en la zona Centro de Guerrero.

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Según la leyenda, en las tierras que los campesinos utilizaban para preparar y sembrar el maíz, había una enorme bestia con feroz rugido, que era el tigre y amenazaba los cultivos.

Los campesinos no podían enfrentar a este animal salvaje, pero un día, llegó al pueblo un extraño viajero que le gustaba tocar la flauta y el tambor, y tocaba para hacer bailar a los tlacololeros .

El viajero recordó que los tigres temen a los truenos y junto con los tlacololeros construyeron un instrumento simulando el sonido de un trueno y ahora se llama el chirrión.

“El Pitero” con su música y acompañado de su perro salen junto con los tlacololeros a buscar al tigre. La leyenda también cuenta que por las noches los campesinos bailan al mismo ritmo.

Carlos Catalán Flores, originario del municipio de Zumpango, es músico folclórico de la danza de l os Tlacololeros y acompañado de su flauta hecha de bambú o carrizo y tambor con forro de cuero de animal, hace vibrar los que escuchan la música.

Adriana Covarrubias | El Sol de Acapulco

Con el sonido y acompañado de un movimiento de intercambio de pasos, tocando lo 11 sones que identifican a este baile tradicional de la región de la zona centro de Guerrero.

“Esta danza nos identifica como zumpangueños, como guerrerenses y mexicanos y es una de las danzas que nos identificamos a nivel nacional e internacional”.

Recordó que la danza de los Tlacololeros nació con otro nombre en la región de La Montaña baja, en los municipios de Chilapa y Zitlala como danza de los Zoyacapotero, pero más tarde un obispo trasladó este baile tradicional a la región Centro en municipios como Tixtla, Mochitlán, Quechultenango, Zumpango, Tierra Colorada y Chichihualco y le denominan Tlacololeros .

Explicó, Catalán Flores que Tlacololero, es el campesino que se dedica a la labor del campo y el grupo de danzantes lo componen con 16 elementos y la integran siete pares.

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Durante la danza los acompaña el tigre y "el pitero", quien ejecuta los sones con una flauta y tambor para dar alegría los danzantes de los Tlacololeros , que reflejan al campesino al momento de ir a sembrar.

El músico folclórico, dijo que con la danza de los Tlacololeros ha participado en diversos estados del país y como maestro junto con sus alumnos de una escuela secundaria de Zumpango concursaron en varios estados y obtuvieron el primer lugar, como ocurrió en Almoloya de Alquisiras, Estado de México.

Mientras que en Ixtapan de la sal fueron campeones estatales y pusieron en alto al estado de Guerrero.

“Como dice el dicho son sones que alegran los corazones y siento una alegría dentro de mí porque yo ejecuto sus sones y le doy gracias a mi Dios porque él me enseñó a tocar esta danza y ahora yo he enseñado alumnos” .

Catalán Flores , dijo que ha enseñado a jóvenes del municipio de Zumpango a tocar a través de un taller de música que ha impartido con sones de los Tlacololeros.

“La danza de los Tlacololeros debe de ir acompañada de la felicidad de los danzantes y cada son tiene un significado, como hacer pasos en cruces horizontales y transversales y la danza se compone la primera parte de 11 sones y cada Tlacololero lleva el significado como el Jitomatero, Tapachero , el Maestro y el Salvado r son los de mayor jerarquía dentro de la danza ”, detallado.

A su vez, Martín Basilio Goitia, Tlacololero de Zumpango dijo que durante la danza ellos van espantando al tigre con un chirrión, que simula el trueno, para que no se coma ni les eche a perder su cosecha.

El Tlacololero viste una camisa hecha de ixtle o yute, en el cuello portan mascada, b otas acompañados de chaparreras, máscaras de madera, el chirrión para ahuyentar al tigre y un sombrero forrado de flor de cempasúchil.

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Martín quién tiene cuatro años participando en esta danza, dijo que para mantener la tradición también ha inculcado a su hijo de dos años a este baile antiguo.

Jorge Marino Visoso , presidente del comité de los Tlacololeros dijo que el nombre nace de la tierra que se quema para sembrar.

El animal que lleva en la mano el Tlacololero , simula al perro que es para espantar al tigre el cual se le avienta y pelean para defender la cosecha.

"El escuchar la flauta y el tambor se siente en la sangre el ritmo, hierve y hay que moverse".

Comentó que la danza de los Tlacololeros se ha llevado a C osta Rica, Ciudad de México, Arizona , y estados como Nebraska, Estados Unidos y muchos guerrerenses radicados en esos países han seguido la tradición de este baile guerrerense.