A gritos como "Vieja tenías que ser" y otros insultos más, está acostumbrada Carmen Mora Camacho, una mujer con 12 años trabajando como taxista en el puerto de Acapulco, quien, a bordo del primer taxi híbrido en la ciudad, desafía los efectos de la violencia.
Madre de tres hijos a quienes crío mientras trabajaba, Carmen relató que ingresar al ámbito laboral fue muy difícil para ella, sobre todo en un ambiente “machista” en donde los hombres no aceptan que las mujeres pueden desarrollar un oficio igual o mejor que ellos, "quizá por miedo a ser superados por una mujer".
El primero de los enemigos fue el bullying de los demás trabajadores del volante, según nos relató, debido a que en infinidad de ocasiones trataron de hacerle creer que no podría trabajar en la "ruleteada", porque ese es un trabajo exclusivo para hombres.
"Yo nunca me deje intimidar, ni a mi marido le permitía que me agrediera, mucho menos a los compañeros. Otra cosa importante es ponerles límites a las amistades, ya que muchos hombres creen que por ser mujer andas buscando pareja y por eso es bueno establecer límites para que no se sobrepasen, sabiendo llevar los problemas puedes salir adelante, con mucha actitud positiva", señaló.
Con el tiempo, Mora Camacho fue haciendo del taxi un modo de vivir a través de la innovación, al grado de que en la actualidad es dueña de tres permisos para trabajar de esta manera y, uno de ellos, lo hace con el que aseguró, es el primer vehículo híbrido que presta servicio en el transporte público de Acapulco.
"Una mujer con visión es distinta a un hombre, un hombre piensa en alcohol y yo en lugar de eso pensé en la innovación, compré un auto híbrido y con él me ahorro más del 50 por ciento de lo que me gastaba antes en gasolina", mencionó.
Cómo toda acapulqueña, la señora Carmen tiene que enfrentar las inclemencias de la inseguridad y violencia, y su trabajo la ha llevado a vivir situaciones de riesgo al mencionar que "he estado en balaceras, en las colonias más peligrosas de Acapulco y gracias a Dios nunca me ha pasado nada", debido a que asegura no utiliza su coche para buscar problemas.
Hoy día, cuenta que el trato que brinda al frente del volante la han llevado a generar buenas ganancias, debido a que trata de hacer sentir seguros a los turistas que atiende en el sitio de taxis del hotel Emporio, en la zona Dorada de la ciudad y a lo largo de los años esa ha sido su mejor carta de recomendación.
Aunque destacó que en la calle hay automovilistas que continúan gritándole insultos, relacionando su género con malas formas de conducir, dejó en claro que todos los días trata de dejar en claro que es una mentira y evidenció que hay hombres que manejan “peor” que una dama.
De acuerdo al último censo del INEGI, en el año 2013 Guerrero fue la segunda entidad del país con mayor número de mujeres laborando en el sector público o privado, con el 49 por ciento de ellas en empleos, tan solo por debajo de Tlaxcala y arriba de Oaxaca.
En contraparte, el secretariado nacional de seguridad, ubica a la entidad en el cuarto lugar en delitos contra las mujeres, lo cual lo convierte en un lugar peligroso para el sector.