Prestadores de servicios turísticos de la zona tradicional de Acapulco denunciaron que los llamados “viene, viene”, ahuyentan al turismo que los visita por sus altos costos de estacionamiento en la vía pública.

Sin que nadie los regule y supervise llegan a cobrar de 250 a 300 pesos por todo el día durante los fines de semana, explicó el señor Jaime Torreblanca Mareos dedicado a la industria sin chimeneas.

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Dijo que en la zona de Caleta y Caletilla las ventas han bajado a consecuencia del abuso de los “franeleros”, afectando su economía familiar.

Torreblanca Mareos mencionó que ya se han quejado con el director de vía pública y que esté en su momento los ha quitado sin embargo, solo se van durante el operativo y luego vuelven a ponerse.

Además, también denunciaron qué hay puestos pequeños en la vía pública que venden refrescos entre otras cosas, lo cual les afecta ya que ellos no pagan una licencia de funcionamiento como los comercios establecidos.

Finalmente el prestador de servicios turísticos hizo un llamado a las autoridades municipales a poner orden en esas quejas que afectan sus ventas.