En esta temporada de lluvias el consumo y venta de pan incrementó el 40 por ciento en el estado de Guerrero.
Y es que el descenso de temperatura se relaciona con el antojo de un café o chocolate caliente, lo que la gente asocia o acompaña directamente con un pan dulce.
Con varios años de experiencia, Sarahi y su esposo venden pan dulce de la Venta, producto que es muy conocido entre la población.
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“Se incrementa en un 40 por ciento la venta y durante esos días de lluvia hacemos más piezas, sobretodo más las conchas y las lisas que son los panes que más nos piden”, mencionó.
A pesar del aumento en la compra del producto, las ganancias no siempre son altas porque hay ocasiones que las precipitaciones pluviales son muy intensas y la gente no sale de su casa por temor a mojarse y otros más evitan el pan por los cambios en la alimentación como la restricciones de harina, azúcar, por enfermedades como la diabetes.
Las personas gustosas por las harinas, en ocasiones se previene para los días con bajas temperaturas y optan también por comparar varias piezas de pan con anticipación.
Los precios son variados según los tamaños, van desde los 7 a 15 pesos y los que más se comercializan son los “gusanitos, conchas, la lisa o pelona, borrachito, la trenza o chalupa y los que van rellenos de crema pastelera”.