La falta de oportunidades de trabajo, apoyos para la producción del campo, además de una pobreza extrema en las comunidades rurales de Guerrero, han provocado un incremento en la migración de indígenas a las ciudades en busca de una mejor calidad de vida.
Tan solo en Acapulco, la migración de quienes hablan una lengua indígena ha incrementado en más de un tres por ciento en este año, y esto es debido a que en las comunidades no hay oportunidades para tener una mejor calidad de vida tanto para mujeres, hombres y menores de edad.
De acuerdo a las últimas cifras que se tienen en el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI), en el estado de Guerrero, se tiene un registro de por lo menos unos 600 mil indígenas la mayoría de estos en la zona de la Montaña de la entidad, de estos 600 mil, 26 mil 780 se encuentran ya radicando en distintos asentamientos humanos del puerto de Acapulco.
Los indígenas pese al paso de los años y de la lucha que han emprendido con manifestaciones, como marchas, bloqueos y plantones, siguen sufriendo de una gran marginación no solo por parte de las autoridades de gobierno, sino por la misma sociedad que los ha rechazado por su vestimenta, su color de piel, su pobreza y por el dialecto con el que se comunican.
El mayor porcentaje de indígenas que han migrado a ciudades como Acapulco en busca de una mejor calidad de vida que en muchas ocasiones no encuentran por el rechazo de las autoridades y de la sociedad, son mujeres que salen de sus comunidades no solo por no contar con oportunidades para sobresalir, sino también para escapar de las costumbres que por años han tenido con la venta de su inocencia a cambio de animales o tierras.
Las mujeres indígenas que llegan a Acapulco muchas de estas con dos o tres hijos menores de edad que también son sometidos a actividades laborales para obtener un mayor ingresos económico con el que puedan cubrir las necesidades de vida que tiene al llegar a esta ciudad, se dedican a la venta de artesanías, a la comercialización de ropa típica de sus comunidades, a labores domésticas las cuales no son bien remuneradas, a limpiar parabrisas y en ocasiones hasta a la venta de fruta en las calles.
En Acapulco se ha incrementado este año un tres por ciento el número de indígenas radicados
Magdalena Baltierra García directora a los grupos étnicos en el municipio, manifestó que este año, se ha tenido un incremento de por lo menos un tres por ciento en el número de indígenas radicados en esta ciudad.
“Hemos hecho un diagnóstico, y hasta el año pasado se tenía en Acapulco un registro de 25 mil indígenas, y en la actualidad se rebasa los 26 mil 700, y nos hemos dado cuenta de este crecimiento por el padrón que se hace en las colonias donde hay presencia de un hermano que habla algún dialecto”, precisó la directora de los grupos étnicos, quien lamento que se siga relegando a esta raza humana cuando todos tenemos el mismo derecho a vivir a recibir atención y servicios públicos.
Dijo que es lamentable, porque el rechazo que se sigue teniendo a este sector de la sociedad, también ha afectado a cientos de niños, que en ocasiones deben de abandonar escuelas del nivel primaria donde según acuden niños normales, para ingresar a instituciones bilingües por el mal trato, el abuso y por la discriminación que sufren.
Aseguró que las escuelas bilingües se crearon en las colonias donde habitan los indígenas, por la discriminación que sufrían los hijos de estos al asistir a instituciones donde acuden los niños que no hablan un dialecto.
El trabajo en las comunidades rurales es la agricultura, pero esto ya no da para seguir viviendo, no se tiene el apoyo para hacer producir las tierras y esto obliga a los indígenas a migrar a otras ciudades principalmente a las cabeceras municipales donde creen que hay mayor oportunidad para sobresalir, “cosa que no es verdad porque aquí sufren de discriminación.
Señaló que en la ciudad donde llegan a fincar una propiedad, los indígenas se dedican a una mano de obra pesada porque no les dan la oportunidad de tener un desarrollo entre la sociedad, mientras tanto otros hacen tareas que tienen que ver con la venta de artesanías que es uno de sus fuertes, la venta de fruta, raspados en las calles, así como de collares, pulseras y ropa que comercializan desde niños, hasta ancianos en las playas y las calles.
Hay esperanza en este nuevo gobierno para los indígenas
Pese a la discriminación y la falta de apoyos, los indígenas que radican en Acapulco tienen la esperanza en este nuevo gobierno de la cuarta transformación que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Creemos en esa política de que no puede existir un gobierno rico para un pueblo pobre que ha estado planteando el presidente López Obrador, creemos en que todos somos iguales y que todos tenemos los mismos derechos que están plasmados en la misma constitución, aunque hasta este momento a los indígenas se les ha quedado a deber mucho por esta sociedad”, expresó Magdalena Baltierra García.
Los indígenas, fueron parte importante en el triunfo de Andrés Manuel López Obrador, por lo que ahora este gobierno de la cuarta transformación, debe de dar el apoyo que se requiere para terminar con la problemática que ha mantenido en el abandono a este sector de la sociedad.
Lo que se ha gestionado tocando varias puertas en distintas dependencias son apoyos para que los indígenas tengan una mejor calidad de vida, una mayor atención, así como mejores servicios que también son parte fundamental para que se cumpla con el compromiso de tener una política que va encaminada primero a los pobres.
La mayoría de los indígenas que han llegado a radicar en Acapulco, provienen de comunidades de la zona de la Montaña del estado de Guerrero, sin embargo, también se cuenta con personas que llegan de lugares ubicados en la Costa Chica y la Costa Grande, donde se sufre también de una pobreza extrema.
Las indígenas sufren discriminación
Por otro lado, integrantes de la organización de Mujeres Indígenas y Afro mexicanas Radicadas en este municipio, destacaron que más del 50 por ciento de las mujeres que radican en este destino de playa y que hablan un dialecto, no solo sufren de pobreza sino también de violencia física y verbal.
Maribel Calixto Estaqueo indígena dedicada a la venta de artesanías en la plaza Politécnica y proveniente de Metlatonoc el municipio considerado como el de mayor pobreza y marginación de Guerrero, dijo que en algunos lugares los hombres no dejan que acudan a recibir atención medica y por esta razón que ha incrementado la muerte materna.
La representante de las mujeres indígenas, informó que se tiene conocimiento que a nivel nacional se tienen 68 lenguas entre las que destacan la Náhuatl, Tlapaneco, Amuzgo y Zapoteco, las cuales se tienen en las comunidades indígenas del estado de Guerrero.