La iglesia católica en Acapulco consideró preocupante que las personas y comunidades estén sumergidas en el miedo y la inseguridad, en medio de los hechos de violencia que se han registrado en el estado de Guerrero.

En su posicionamiento de cada domingo, el arzobispo Leopoldo González González urgió a las autoridades a garantizar la seguridad de las personas, ya que temen salir en horas de la noche y ser víctimas de la inseguridad.

“Cada uno de nosotros está llamado a ser un artesano de la paz, uniendo y no dividendo, así como extinguir el odio y abrir las sendas del diálogo”, indicó.

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Lamentó que la violencia en el Estado y la ciudad se ha legalizado en contra de “quienes se encuentran creciendo en el seno de su madre”, al referirse que en la mayoría de las entidades del país se ha legalizado el aborto.

Esta semana se registró el ataque armado de siete miembros de una familia en el poblado de Tres Palos, que dejó un saldo de seis personas y una adolescente herida, así como los 11 desaparecidos en Chilapa fueron dejados sus cuerpos al interior de una camioneta en Chilpancingo.

Hasta el momento, las autoridades federales y estatales han atendido estos casos de violencia, con el incremento de presencia policial para mantener la protección de las y los ciudadanos.