La dinamita le ganó terreno al mar en Acapulco

El progreso de una aldea de pescadores dio paso a la gran ciudad turística que requería la construcción de un muelle fiscal

Celso Castro | El Sol de Acapulco

  · miércoles 28 de septiembre de 2022

El pueblo de pescadores contaba con un sencillo muelle de madera. /Foto: Cortesía Javier Morlet Macho.

La dinamita ganó terreno al mar y nació el muelle fiscal, que dio paso a la aldea, que después se convirtió en pueblo de pescadores, luego a una ciudad y finalmente a una gran metrópoli turística.

La actividad portuaria de Acapulco constituye uno de los elementos indispensables para explicar el desarrollo de la ciudad. No se puede pasar por alto que fue este destino de playa el principal puerto del Pacífico durante la época colonial, que por sus playas desfilaron enormes riquezas gracias a ello se fue forjando a su alrededor.

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El comercio y el turismo arribaban a la endeble estructura. /Foto: Cortesía Javier Morlet Macho.

Retrocediendo en el tiempo, existen pinturas de 1870 que dan una idea de que tan importante fue la actividad marítima, pero también del primer muelle que se construye en este destino turístico y que era utilizada principalmente en la naciente actividad comercial que se extendía hasta la Ciudad de México y que era el punto de comunicación con otros mercados del extranjero.

El vagón actualmente se encuentra en desuso./ Foto: Abel Miranda | El Sol de Acapulco

De acuerdo a datos recopilados por el ex regidor Javier Morlet Macho, es importante no perder de vista que el puerto de Acapulco presenta una actividad comercial con la Nao de China, pero que al paso de los años hubo necesidad de tender nuevas líneas comerciales, con países como los Estados Unidos y algunas naciones del viejo Continente, de tal suerte que se puso en marcha el proyecto de tener un muelle más funcional y más moderno en aquella época.

Las autoridades locales hicieron un estudio del terreno y en lo que hoy está construido el Malecón, se edificó el muelle y esto significó ganarle espacio al mar, pues en ese tiempo inundaba toda esa área y las olas rompían al pie del Fuerte de San Diego, aunque uno de los problemas que enfrentaron los ingenieros fue que no había suficiente profundidad para que atracaran embarcaciones de gran calado.

Esto, sin embargo, se resolvió ampliando el muelle mar adentro, hasta tener una profundidad de 7 hasta los 12 metros de hondo, con el propósito de que los barcos pudieran fondearse y descargar su mercancía, que, por cierto, se hacía sobre rieles de ferrocarril y así se podría trasladar sin mucho esfuerzo a tierra firme y de ahí llevarla a la capital del ¹país.

Como dato curioso, explica Javier Morlet, es que casi no se menciona que como el combustible de las naves que atracaban en el puerto, usaban carbón, se construyó una gran bodega que era propiedad de la "Pacífic Mail Steam Ship Co", en donde actualmente se yergue el Palacio Federal, desde ese sitio se surtía a los barcos.

Otro dato que tampoco se divulga, es la existencia de otro muelle de la "aguada" de donde a través de un blanchon surtían de agua a las embarcaciones y se encontró a la altura de lo que hoy es la cancha de basquet ball de la CROM , que operó por muchos años y que desapareció a inicios de 1940, cuando inicia el proyecto del nuevo malecón que es, tal y como se encuentra en la actualidad.

Conforme fue creciendo la ciudad, fue mayor la necesidad de un muelle fiscal. /Foto: Cortesía Javier Morlet Macho.

El parque de a Reina lleva su nombre en honor a la monarca. / Foto: Abraham Martínez | El Sol de Acapulco

También dio paso a la construcción del muelle Fiscal y que tomó forma a raíz del trazo que se hizo en la construcción de la costera Miguel Alemán, que se tuvo que minar parte deese tramo y ganarle terreno al mar, hasta hacerlo retroceder hasta donde está en la actualidad, para construirse el nuevo muelle, aunque años después fue desmantelado para dar pie a la continuación del malecón que se hizo hacia la Península del cerro de La Pinzona.

Poco más tarde, se construyó el nuevo muelle fiscal, con área para que atracaran los grandes cruceros turísticos y barcos de carga, al tener una mayor profundidad, que mantiene sus mismas dimensiones en la actualidad y sigue recibiendo al turismo extranjero que llega vía marítima al puerto de Acapulco y se transportan, además, vehículos que se arman en el país, hacia Centro y Sudamérica.