Autoridades encargadas de la protección ecológica, realizaron una inspección en las instalaciones sanitarias de un supermercado ubicado en la zona Diamante de Acapulco, como parte de las revisiones que se hacen a distintos negocios que son señalados por presuntamente infringir las leyes y verter aguas sin tratar a canales que desembocan al mar.
Luego de las denuncias ciudadanas de aguas negras llegando a distintos puntos de las playas de zona Diamante, personal de la dirección de Ecología y Medio Ambiente, así como de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de la Promotora Turística (Protur), se dieron cita en el estacionamiento de la mencionada empresa, ubicada en el boulevard de Las Naciones, esquina con la carretera a Barra Vieja.
Con palas y picos, pretendían comenzar con la excavación de un área verde de dicha instalación, desde donde muy posiblemente se derraman los contaminantes, sin embargo, después de sostener diálogo con personal encargado del establecimiento, la acción fue pospuesta para el día de hoy jueves 24 de enero, en donde se contempla la presencia de la titular de la dirección de Ecología.
El pasado domingo, personal de las mencionadas dependencias realizó la primera clausura de una conexión clandestina de aguas negras en el condominio Marena, la cual ocasionaba que el líquido crudo llegará hasta la playa Revolcadero II, certificada a nivel internacional por Pronatura a través de la Blue Flag.
De acuerdo con autoridades de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Acapulco (CAPAMA), en Acapulco existen por lo menos siete puntos críticos de descargas de estos líquidos que llegan directamente al mar, los cuales buscarán que sean erradicados en su totalidad.