Aun cuando el puerto de Acapulco ha mantenido un repunte turístico que ha dejado en el último año un incremento en las cifras de ocupación hotelera, afluencia de visitantes y derrama económica, el problema del cierre de negocios por la extorsión, las amenazas y el pago de piso al que son sometidos empresarios, ha provocado el cierre de dos mil 850 establecimientos comerciales en la ciudad.
Los empresarios en todos los sectores de Acapulco como hoteleros, restauranteros y discotequeros, han expresado que la crisis ocasionada por la violencia generada por grupos delictivos que a través de llamadas telefónicas y amenazas por escrito en cartulinas los extorsionan, se ha venido agudizando desde el 2013 cuando se empezaron a dar los primeros cierres de establecimientos comerciales.
El presidente de la Federación de Cámaras de Comercio del Estado de Guerrero, (Fecanaco), Alejandro Martínez Sídney dijo que el promedio de negocios cerrados por año desde el 2013 al 2018 por la inseguridad en Acapulco, es de 500 establecimientos desde discotecas que permanecieron ubicadas en la costera Miguel Alemán, hasta misceláneas situadas en colonias populares y el primer cuadro de la ciudad.
“Este problema viene al alza en Acapulco, es un problema que se ha venido agudizando desde los últimos cinco años a la fecha, y esto nos tiene preocupados porque a pesar de que se han tenido buenos resultados en materia turística la industria empresarial del puerto, se sigue manteniendo sometida a las extorsiones y a las amenazas que han dejado hasta por escrito en cartulinas los integrantes de los grupos delictivos que no han sido enfrentados de manera contundente por las autoridades de los gobiernos”, precisó el dirigente empresarial.
Destacó que los negocios que han cerrado se encuentran ubicados en primer lugar la colonia Progreso una de las más céntricas y emblemáticas de Acapulco, así como el área del primer cuadro de la ciudad, el mercado central, la central de abastos, la zona de hospitales, la Garita entre otras más.
En este mismo sentido, el ex presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles y vicepresidente de la Canaco Acapulco, Javier Saldívar Rodríguez manifestó que, de enero a la fecha, en este destino de playa se han registrado el cierre y la quiebra de 350 establecimientos comerciales a consecuencia de la violencia que ha golpeado de forma directa a este sector que genera las fuentes de empleo para miles de acapulqueños y guerrerenses.
El también empresario en la rama hotelera, manifestó que las causas de los cierres de negocios de todo tipo desde pequeñas misceláneas hasta grandes discotecas de la costera Miguel Alemán, se debe a la extorsión, el pago de piso y las amenazas en contra de los propietarios quienes en muchas ocasiones deciden salir de la ciudad para garantizar su seguridad y la de sus familias.
En su opinión, el presidente de la Canaco, Jacinto de la Cruz pidió a las autoridades de los tres niveles de gobierno a que se pongan las pilas y que no dejen que la delincuencia mate la economía de miles de acapulqueños que se han quedo sin un sustento por el cierre de los establecimientos comerciales.
Por último, los tres empresarios manifestaron que con el cierre de los dos mil 850 negocios en Acapulco, se han cerrado más de cinco mil fuentes de empleo debido a que en un solo establecimiento comercial se llegan a perder entre 15 a 20 empleos.