La “nueva normalidad” que pretende el gobierno federal echar andar a partir del primero de junio, para reactivar la economía del país, podría repuntar los casos de Covid-19, principalmente en estados como Guerrero, en donde debido a la anarquía que prevalece en la conducta de algunas personas, que no dimensionan la magnitud de la pandemia, se extiende hasta el 15.
En opinión de dirigentes de partidos políticos, legisladores, líderes de diversas organizaciones y prestadores de servicios turísticos, que, a pesar de no ser especialistas en epidemiología o cuestiones de salud, por toda la información que han recopilado de la Secretaría de Salud, coinciden que poner fin al aislamiento obligatorio, principal medida de contención del coronavirus, es un caldo de cultivo de un contagio más acelerado.
Por ejemplo, los hoteleros porteños externaron su preocupación de que la reactivación se haga a ciegas, porque les genera incertidumbre que, a pesar del constante incremento de contagios y fallecidos por el coronavirus, se anuncie que van a reanudar actividades cuando no hay todavía claridad para contener la propagación de la pandemia.
El ex presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), Jorge Laurel González, consideró que, van a esperar que acciones se van a tomar para reactivar la economía y en esa medida consideraran abrir las hospederías, porque si no se hace sin un plan de mitigación, podrían acelerar el número de enfermos.
El gobernador Héctor Astudillo Flores en reunión con integrantes de su gabinete les notificó que se va analizar qué actividades esenciales podrían reiniciar a partir del 15 de junio, pero descarto hacerlo el día primero como se acordó previamente en la sesión virtual que sostuvo en la Conferencia Nacional de Gobernadores e integrantes del gabinete federal.
Reiteró, que, las clases seguirán suspendidas, el cierre de las playas y espacios públicos, toda vez son un punto de concentración de personas. Las actividades, en Guerrero, como la minería y la construcción, se irán reactivando en base al semáforo que se instrumentará en el país para ingresar a la nueva normalidad.
En ese sentido, el presidente del Comité Ejecutivo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Esteban Albarrán Mendoza, refirió que, el gobernador Héctor Astudillo Flores, está actuando de manera responsable con este anunció que se prolongarán un mes más las medidas sanitarias y el aislamiento obligatorio, para reducir los contagios en la entidad, luego de entrar a la etapa más complicada del pico de la pandemia.
Dijo que, ha planteado analizar de manera detenida y consultar con la Secretaría de Salud, la posibilidad de reactivar la minería y el ramo de la construcción, en virtud que los más perjudicados en esta crisis sanitaria por el coronavirus, han sido los más pobres, por eso actuará apegándose al comportamiento del semáforo y las indicaciones que haga el sector salud.
Por su parte, el secretario de Salud del estado, Carlos de la Peña Pintos, en sus conferencias virtuales que da todos los días para informar sobre el comportamiento del virus, presenta la cruda realidad que asola al estado, con el aumento incesante de enfermos y la propagación de la pandemia a más municipios, 49 de los 81 existentes, lo que refleja la gravedad de la contingencia sanitaria.
En opinión del Comisionado Político Nacional del Partido del Trabajo, Victoriano Wences Real, en la región de la Montaña, simplemente es imposible en estos momentos levantar las estrategias de mitigación, porque sería tanto como abrir la posibilidad de que se dispare la letalidad del Covid-19.
Dijo que de acuerdo a los reportes oficiales de la SE, hasta este 28 de mayo sumaban 28 los casos positivos de Covid-19 en Tlapa de Comonfort, pero el número de enfermos se va a incrementar, en razón de que aquí en la Montaña, no se lleva un seguimiento ni se practican exámenes para detectar a posibles portadores del virus, por lo que no hay control sobre los casos de contagio.
En ese orden, la diputada del grupo parlamentario de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Mariana García Guillén, se pronunció para que en el puerto de Acapulco se apliquen medidas extraordinarias, como el cierre de mercados y hasta el toque de queda, porque hay algunas personas que no entienden que no aumenten la movilidad y que tienen que cumplir con las medidas sanitarias.
Mientras, que el dirigente de los cooperativistas de Acapulco, Salvador Soto Sánchez, a su vez, admitió que, al paralizarse la actividad turística, los orilló a no poder llevar el sustento diario a sus familias, por lo que son los más interesados en que se reactiven las actividades de playa.
Pero, si la idea de reactivar la actividad turística es sin existir un control de la pandemia, esto va a provocar que vuelva agarrar fuerza el virus y entonces va a ser muy difícil doblar la curva de contagios, “máxime ahora que viene lo peor”, pero lo más molesto es que de nada habrá servido cumplir con la cuarentena, agregó.
El dirigente de la Organización de Permisionarios y Transportistas del Estado de Guerrero (OPTRAEG), Ruperto Rodríguez González, recordó que desde que se declaró la contingencia han cumplido con las instrucciones de usar cubrebocas y guardar la sana distancia, porque en su caso, tienen que salir a trabajar y el anunció de que se va a reactivar la actividad económica lo ven con buenos ojos.
Empero, por otro lado, también les preocupa que haya un repunte de Covid-19, porque eso aumenta los riesgos de contraer el virus y de transmitirlo a sus familias, por lo que, planteo la necesidad de no relajar las medidas de prevención y mantener las ya establecidas, porque esto puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.