Luego de que el área jurídica de la Asociación de Enfermos Renales del Estado interpuso varios amparos ante un juez federal contra el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), por no estar de acuerdo de que se les haya cambiado al Hospital Santa Lucía a los pacientes con problemas renales y recibir su tratamiento de hemodiálisis, este martes vence el plazo de 48 horas para que el instituto justifique el cambio de servicio.
En conferencia de prensa, el director Jurídico de la Asociación de Enfermos Renales del Estado de Guerrero, Juan Carlos Macedonio Galindo, dijo que luego de promover diversos amparos ante el juez federal, el viernes 28 de enero se les notificó con copia certificada el contrato que tiene el IMSS con el Hospital Santa Lucía.
Explicó que en la cláusula décima sexta de este contrato establece la recesión inmediata en caso de que haya una situación como la que prevalece en estos momentos de contingencia, condiciones infrahumanas y mala praxis respecto a la atención médica.
“Es evidente todo lo que se está analizando donde muchos enfermos renales, aproximadamente 590, están padeciendo las condiciones infrahumanas, la falta de praxis por parte del personal y la falta de capacidad del mismo nosocomio Santa Lucía”, precisó.
Comentó que el 4 de febrero se tiene una audiencia con el juez sexto de distrito dentro del amparo 19/2021, donde la queja fue la falta de incumplimiento de una salud digna y se ofertarán todas las pruebas, entre éstas el análisis que se hizo del contrato entre el IMSS y el Hospital Santa Lucía.
“El 4 de febrero a las 11:00 de la mañana tenemos la audiencia incidental para efecto que el juez se pronuncie y siga surgiendo esa suspensión definitiva que es lo que vamos a buscar”, reiteró.
En sentido, dio a conocer que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tiene un plazo de 48 horas, que vence este martes 02 de febrero, para dar cabal cumplimento a lo ordenado, replantee y analice la queja que están solicitando en la demanda de amparo.
El abogado de los enfermos renales dijo que también van a buscar al director general del IMSS, Zoé Robledo, para abordar la mala atención médica que reciben.
Macedonio Galindo dijo que se está impulsando la seguridad jurídica de esta Asociación de Enfermos Renales y no está sola, lo único que pide es una salud digna la cual ha carecido.
A su vez, Miriam Fajardo de los Santos, presidenta de la Asociación de Enfermos Renales en el estado, dijo que sus compañeros están recibiendo tratamiento de muy mala calidad.
