En Guerrero, es literalmente imposible que los 90 mil concesionarios del transporte público puedan renovar su parque vehicular, porque trabajan con números rojos, en virtud que hay una saturación de rutas y están marginados de todos los programas sociales.
Así lo expresó el coordinador de un Nuevo Horizonte para Guerrero, Rogelio Hernández Cruz, al admitir que tienen razón la ciudadanía de exigir que den un mejor servicio y saquen de la circulación los vehículos de alquiler en mal estado, pero aunque quisieran, en estos momentos atraviesa por una grave crisis económica.
Explicó, que si bien es cierto, el gobierno del estado respetó los descuentos que administraciones pasadas les otorgaron y aplicó un 15 por ciento más en este año, el incremento del combustible, las refacciones y a los artículos de la canasta básica, merma sus ingresos en un 60 por ciento.
El líder transportista Hernández Cruz, aseguró que siempre ha declarado que a pesar que su sector es el que mas se utiliza políticamente, es también el más olvidado, el que está exento de los programas de salud, de vivienda y de todos los programas sociales.
A esto, dijo, hay que sumarle que en las principales ciudades del estado, sus calles y avenidas están en pésimas condiciones, debido a la falta de programas de bacheo y es un factor que implica que sus unidades circulen con una suspensión en mal estado, llantas lisas y con desperfectos mecánicos.
Por ejemplo, refirió que en el puerto de Acapulco, a pesar que es la ciudad más importante del estado, está destrozado y hay una total apatía de la presidenta municipal Abelina López Rodríguez, para aplicar recursos en la rehabilitación de sus calles y avenidas, que están llenas de baches y algunos tramos sin asfalto.