La iglesia católica en Guerrero, implementó medidas preventivas para evitar el contagio del coronavirus, pidiendo a los files que acuden a los templos de oración, evitar darse la mano para desear la paz y recibir la comunión en la mano. Ciudadanos aseguran que será difícil acostumbrarse a tomar dichas recomendaciones.
La mañana de este domingo durante las celebraciones religiosas, se constató que los sacerdotes hicieron las recomendaciones a los asistentes a la eucaristía para evitar dar la mano a quien estuviera al lado suyo como signo de paz, con la finalidad la propagación de la enfermedad que hasta la tarde del mismo día había infectado a cinco personas de manera oficial en el país.
De igual modo, invitaban a los creyentes a recibir la ostia en la mano, evitando con ello un contacto directo con la boca, por lo que los asistentes optaron por hacer referencias para ofrecer la paz y estirar las palmas de la mano para sostener el sacramento.
Durante un sondeo realizado en las calles del primer cuadro de Acapulco, consideraron que no será fácil cambiar de hábitos para saludar, debido a que estrechar la mano y dar un beso al encontrarse a un ser querido, son actitudes muy arraigadas en la sociedad, sin embargo, cuando la emergencia de contagio sea alta, por temor las personas acatarán las prevenciones.
“Continuamos saludando de manos por la costumbre, apenas acabo de oír las medidas de prevención ayer y está muy bien. Acostumbrarse cuesta, lleva un tiempo, siempre es un proceso, cuando ya es una alarma grandísima nos dará miedo y ahora sí”, dijo el señor Miguel ángel Ramos.
En la misma postura se mostró la señora Yolanda Canales y Nicolás Pérez, quienes informaron que dentro de sus hogares han iniciado a inculcar a todos los integrantes de su familia sobre las indicaciones dadas por la autoridad, pero al momento es inevitable hacerlo y esperan que la llegada del virus en mención no represente un riesgo mortal para Acapulco.