Elementos de la Marina Armada de México y personal de Semaren intentaron desalojar a poco más de 70 integrantes del astillero ubicado en Playa Manzanillo, quienes se resistieron porque no les presentaron ninguna orden, y para evitar una confrontación, los elementos castrenses se retiraron.
Desde las nueve de la mañana, unos 15 marinos y diez inspectores de la Profepa llegaron con maquinaria pesada y retroexcavadoras para intentar llevarse más de 132 embarcaciones que se encuentran en reparación en la franja de arena, como parte de la recuperación y limpieza de esa zona.
Alberto Lara de los Santos, secretario de Organización de los Astilleros, lamentó que la autoridad federal haya querido sorprenderlos y llevarse las embarcaciones a un corralón en Tunzingo, sin embargo, las lanchas tienen dueño y están pagando por los trabajos que realizan.
“No nos oponemos a la remodelación, pero cómo nos van a prohibir reparar las embarcaciones, de qué vamos a vivir todos los que aquí trabajamos, estamos hablando que íbamos a consensar, habíamos dicho que el astillero lo iban a hacer primero, no nos invitan a las reuniones, no se vale, queremos que nos digan dónde nos van a reubicar”, señaló.
Los inconformes, quienes de inmediato se juntaron en la zona de playa para impedir el paso a la maquinaria, señalaron que algunos marinos acudieron vestidos de civiles y trataron de explicarles que traían orden de llevarse todas las embarcaciones, sin embargo, no la presentaron por escrito.
Los trabajadores del astillero impidieron que las máquinas se fueran y colocaron vehículos particulares para bloquear la calle y evitar que regresaran, al tiempo que hicieron un llamado al Gobierno del Estado, para ser tomados en cuenta y no les quiten de un día para otro su fuente de trabajo, ya que de ello dependen más de 70 familias.
Asimismo, Constantino Ramírez Ramos, presidente de la Cooperativa Bicentenario de Caleta y Caletilla, dijo que esa zona de reparación de embarcaciones tiene más de 60 años y muchos tienen ahí sus lanchas que están en proceso de arreglo, por ello no van a permitir que se las lleven hasta Tunzingo, porque después no podrán recuperarlas.
Para evitar confrontaciones, los elementos de la Marina decidieron retirarse junto con la maquinaria pesada, y aseguraron que volverán con una orden para poder llevar a cabo el desalojo y retiro de todas las embarcaciones y así dejar libre la playa Manzanillo.
