La anarquía que se hace en la invasión de calles y banquetas de la ciudad, no sólo es ejercida por miles de comerciantes informales que se han tolerado por el mismo gobierno, sino también por los vendedores informales que salen de sus locales para apropiarse de las áreas que deberían de ser para uso de los ciudadanos.

Son cientos de locales comerciales que, al interior de mercados como el Central y el Constituyentes, están cerrados debido a que sus propietarios se salen a invadir las calles y las banquetas, así como áreas de estacionamientos como es el caso de la avenida Constituyentes, donde los carriles para el paso de los vehículos se han disminuido de manera considerable.

Tan sólo en el punto del Mercado Central y Constituyentes, un gran número de comerciantes con mesas de madera, hieleras cajas de cartón se han apoderado de una parte del estacionamiento de vehículos en la parte baja del nuevo puente elevado que la pasada administración municipal construyó con una inversión económica superior a los 50 millones de pesos.

La invasión de calles y banquetas por miles de vendedores no sólo se sufre en esta parte de la ciudad, sino también en la avenida Cuauhtémoc, así como en la propia costera Miguel Alemán, donde propietarios de parianes han invadido hasta los accesos a las playas con su mercancía, esto ante la vista de las propias autoridades de gobierno.

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Entre los comercios que invaden las calles de la ciudad se encuentran desde los que venden alimentos, hasta ropas, pescados, mariscos, ropa, calzado, dulces, aguas frescas, hasta verduras que son considerados como de la canasta básica.

Este problema ha provocado la inconformidad de miles de acapulqueños que, ante la invasión de calles y banquetas por los comerciantes, se han visto en la necesidad de caminar sobre la orilla de las carreteras aun cuando esto represente un gran riesgo para su integridad física.

Según las autoridades de vía pública en las calles de la ciudad, han sido detectados poco más de 25 comerciantes, no sólo irregulares sino también propietarios de puestos ubicados en los distintos mercados de Acapulco.