La presidenta Adela Román Ocampo, afirmó que la descarga de aguas que desembocan a la playa Papagayo a través del canal pluvial Magallanes, y que fue denunciada en redes sociales el pasado miércoles, no son pluviales, sino un escurrimiento provocado por las fuertes lluvias que se por más de dos días se tuvieron en la ciudad, al mismo tiempo calificó como un montaje las imágenes que circularon en redes sociales, con las que pretenden afectar el trabajo que ha realizado su gobierno y su imagen como presidenta de Acapulco.
En conferencia de prensa realizada en el hotel Krystral Becah ubicado a un costado del canal Magallanes, la alcaldesa dijo que de acuerdo a un dictamen que fue presentado por la directora de Conagua en Guerrero, Norma Arroyo, el escurrimiento de este miércoles, no presentó ni olor ni características propias de las aguas negras, por lo que queda descartado que existiera alguna contaminación a la playa.
“Las imágenes que estuvieron circulando en redes sociales, en distintos medios locales y nacionales, hace suponer un probable montaje de imágenes de parte de interese oscuros que pretenden daños la imagen del puerto, el trabajo del gobierno municipal, y probablemente afectar mediáticamente a su servidora en carácter de presidenta municipal”, expresó Adela Román ante medios de comunicación.
En su declaración la alcaldesa, dijo que el bienestar y la imagen de Acapulco, deben de estar por encima de intereses de luchas políticas, dijo entender perfectamente que los gobiernos emanados de la cuarta transformación encabezados por el presidente López Obrador, han atacado muchos intereses que, por años, lastimaron a la sociedad y que a hora están decididos a detener el avance de estos gobiernos.
Hizo un llamado a los ciudadanos, a los empresarios y a los restauranteros, y a los prestadores de servicios turísticos, a defender Acapulco, de esta campaña que a todas luces parece estar orquestada y dirigida a dañar al puerto más emblemático de México a nivel internacional, y agrego que non es justo que después de meses de mucho sufrimiento para la gente ocasionado por la pandemia del Covid-19, se pretenda dañar la actividad turística de esta forma.
Aseguró que no se va a permitir que se siga afectando la imagen de Acapulco, y por eso el llamado a la sociedad en general, a los jóvenes, a los universitarios, “porque pese a quien le pese, la transformación de Acapulco, está en marcha y no se detendrá, al igual que la de México, que hoy es presidida por un gran hombre Andrés Manuel López Obrador “.
Recordó, que desde que se iniciaron estas denuncias mediáticas hace algunos meses, se iniciaron procedimientos administrativos por parte de la dirección de Ecología y la Capama, a fin de corregir de inmediato y sancionar a los posibles responsables de esta situación, por lo que están en proceso más de 70 procedimientos que pueden ameritar sanción económica o en algunos casos penal, en caso de comprobarse con datos técnicos y científicos los derrames de aguas negras por parte de particulares y predios comerciales.
Manifestó que algunos de los predios a donde se iniciaron procedimientos, presentan algunos adeudos históricos de pasos por consumo de agua potable que abarcan años y que acumulan en conjunto un adeudo cercano a los mil millones de pesos, ocasionando con esto primero el quiebre de la paramunicipal y la incapacidad del organismo para renovar la infraestructura, y el daño ecológico a la bahía que es propiedad de todos los mexicanos.
Por último y previo a un recorrido por la zona donde desembocan las aguas del canal Magallanes, la presidenta Adela Román Ocampo, expresó que se seguirá defendiendo a Acapulco, y adelantó que ya se estableció una vigilancia constante para verificar y sancionar los infractores de vertimientos de aguas negras a las playas.