El reciente corte de energía eléctrica a la CAPAMA ante un adeudo millonario a la CFE, trajo como consecuencia la escasez del vital líquido en uno de los hospitales más grandes en municipio de Acapulco, el cual tuvo que recurrir a la adquisición del servicio a través de pipas repartidoras.
El pasado miércoles 06 de marzo del año en curso, la Comisión Federal de Electricidad dejó sin energía por un adeudo a la para municipal, lo cual afectó las operaciones del sistema de captación Papagayo II y dejó sin agua a gran parte de la ciudad.
De acuerdo con Carlos Hernández, empleado de una empresa que se dedica a la venta de agua en pipas, el pasado viernes 8 de marzo tuvieron que atender una "contingencia" que se generó en el Hospital Vicente Guerrero del IMSS, en donde se quedaron sin agua, presuntamente por la escasez que provocó el corte de luz.
"Ahorita en estos días la demanda ha sido normal, a excepción de que tuvimos que atender al hospital Vicente Guerrero, en esos casos se descuidan a particulares por un momento para darle el servicio pronto por ser un caso especial", señaló.
Fuentes internas del nosocomio, confirmaron que este se quedó sin agua potable, por lo que de manera inmediata recurrieron a la compra de pipas para satisfacer la necesidad, dejando en claro que en ningún momento se generó un problema mayor y para este sábado, el suministro de la CAPAMA se estaba regularizando.
