A unos días de que concluya la administración del gobernador Héctor Astudillo Flores, los padres de familia aseguran que heredará un sistema educativo en harapos y reprobado.
Fernando Díaz Ángeles, presidente de la Organización de Padres y Tutores por la Educación, lamentó que la educación en Guerrero, siga con un ciclo escolar con bajo aprovechamiento y literalmente reprobado.
A tres días de que finalice el sexenio de Astudillo Flores y entre al relevo la primera mujer que gobernará a este estado suriano, Evelyn Salgado Pineda, el dirigente de los padres y tutores asegura que heredará un panorama desolador en materia educativa.
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Además, de las aproximadamente once mil escuelas que hay a lo largo y ancho del territorio guerrerense, la mayoría está en estado de abandono, sucias y con daños por el sismo del 7 de septiembre.
Díaz Ángeles reprochó que se haya tomado como excusa la pandemia del Covid-19, para no invertir en la educación y de gestionar recursos extraordinarios para la rehabilitación de los planteles escolares.
Afirmó que las escuelas que están abiertas y funcionales se debe a la aportación que hicieron los padres de familia, que son los que tuvieron que cargar con los gastos para que sus hijos pudieran recibir clases presenciales.
Por lo que el gobierno de Héctor Astudillo Flores se va dejando un gran pendiente con la educación y el peso sobre sus hombros por el bajo aprovechamiento de los alumnos, por no cambiar la estrategia para que el modelo educativo a distancia funcionará.