La familia Cruz Salvador, forma parte de las miles de historias que en esta fiestas decembrinas, no podrá celebrar ni tener una cena de navidad, a causa de la pandemia por Covid-19, que lo dejó desempleado y además fue víctima de esta enfermedad.
Javier Cruz Venegas, es un adulto mayor con 72 años de edad que difícilmente puede encontrar trabajo y en esta noche buena no tendrá una cena, porque no tiene dinero ni “para el pollo”, por lo que junto con su esposa Marcela Salvador de 70 años de edad se dormirán temprano como cualquier dia.
“Siempre comemos un pollito en navidad pero ahorita ni para el pollo, y nos la pasaremos dormidos, no nos queda de otra ”, dijo.
Desde hace 10 meses, que ha durado el confinamiento por el Covid-19, don Javier Cruz , quien vive en la colonia ampliación se quedó sin empleo.
Le ayudaba a un amigo a realizar trabajos en mantenimiento y reparación de aire acondicionado, aunque dice que él le hace de todo, incluso durante un tiempo estuvo de cargador en la central de abasto, descargando cajas de verduras.
“Trabajaba como chalán con un señor que da mantenimiento a los aires acondicionados, pero se acabo el trabajo cuando empezaron los contagios y quedó de hablarme pero sigo esperando”.
Don Javier Cruz, cree que se enfermó de Covid-19, porque tuvo temperatura, diarrea, se le subió la presión y se atendió con médico particular donde gasto 10 mil pesos, donde utilizo sus ahorros y también pidió prestado, el cual aun no termina de pagar.
Y de paso, su esposa Marcela Salvador también se enfermo, durante ocho meses, estuvo tratándose un problema de pie diabético.
El dinero que tenia ahorrado lo pensaba ocupar para poner un pequeño negocio, pero ese sueño quedó atrás.
Ahora, su preocupación es conseguir trabajo, pagar deudas y tener para comer.
A pesar de que su hijo, que es su vecino, le apoyo con poco para comer, don Javier Cruz se pone triste al no tener trabajo, desde marzo.
“Mi hijo me apoya con poco aunque sea para los frijolitos o nos trae pizza, porque trabaja haciendo pizzas, pero él mantiene a su esposa y tres hijos y van a la escuela, tiene sus gastos y yo no encuentro trabajo y así que ya debo un chorro por estar pidiendo prestado para ir comiendo y ya nada más estoy pensando como pagar”, relató.
Lamentó que en estos momentos no tenga dinero para cenar ni mucho menos pudo hacer planes para preparar una rica cena y convivir en familia con sus dos hijos, “no hay planes y sin dinero nos la pasaremos dormidos”.
Recordó que antes en una cena su gasto era de mil pesos para convivir con su esposa y sus hijos, pero ahora eso no será posible.
Dijo que su hija también se quedo sin empleo a raíz del recorte de personal que hicieron en su empresa dedicada a las frituras y por la pandemia.